Abogado del turno de oficio

22 mar 2016 / 17:20 H.

Después de muchos años reivindicándolo por parte del Colegio de Abogados de Jaén, el Ayuntamiento de nuestra ciudad, por fin, ha confirmado la inauguración de una calle de la capital dedicada al Abogado del Turno de Oficio, prevista para la semana siguiente de Semana Santa. Su ubicación tendrá lugar en una de las calles transversales que unen el Bulevar con la Carretera de Madrid. Cuestión ésta que ya ha sido llevada a cabo en numerosas ciudades de España, y también de Andalucía, y que Jaén, no debía desaprovechar la oportunidad. Ojalá esta iniciativa cunda entre los municipios de nuestra provincia. Es probable que la vena profesional de defensor jurídico de nuestro alcalde haya influido notablemente en la adopción de esta medida. Y, aunque quizá la importancia de este hecho no sea valorado en su totalidad, puedo asegurarles que se trata de una magnífica noticia para la sociedad jiennense. La atribución de un nombre a las calles de la ciudad supone la constatación de un reconocimiento público y, en este caso, la confirmación de un símbolo al respeto que merece la figura y la labor de estos profesionales. El abogado de oficio es la clara imagen de la generosidad y solidaridad. Letrados que no dudan en poner su conocimiento, tiempo y esfuerzo a disposición de los menos favorecidos, sin que les resten sus ánimos las guardias de veinticuatro horas, los trescientos sesenta y días del año, los obligados desplazamientos a cualquier punto de la provincia y a cualquier hora del día o de la noche y los exiguos importes con que se les remunera por tan ajetreados servicios prestados. Todo ello, aderezado, en ocasiones, por una falta de sensibilidad e ingratitud, por parte de ciertos sectores sociales. Estoy convencida de que la naturaleza humana del abogado de oficio debe de ser excepcional, y que la única motivación que los impulsa se encuentra en la verdadera vocación y en el compromiso social de cada uno de ellos. Enhorabuena.