Debate a cuatro

Debate a cuatro lo llamaron, y nadie dijo nada. Rajoy, cazando moscas; Sánchez, casi de adorno; Rivera, cargado de titulares de prensa sin leer el texto, e Iglesias, haciendo a la izquierda echar de menos a Alberto Garzón. Un debate vacío que aventura una triste campaña electoral.

Y es que el pueblo español está saturado de discursos propagandísticos sin sustancia. Problemas reales todos, sí; pero mal tratados y argumentados, y utilizados para cargar contra partidos y no por el bien de España. La lacra del terrorismo machista, mujeres asesinadas por una sociedad patriarcal y miles de menores que quedan en régimen de visitas de un maltratador fue el tema estrella del que nadie dijo nada.

Quiero una campaña electoral real, humilde en recursos, pero que sea rica en contenidos. No quiero cuatro personajes echándose en cara lo que España ya sabe. Lo que queremos los españoles y las españolas es saber qué cambios se van a producir, qué medidas van a tomar y en qué lugar quedamos las ciudadanas y los ciudadanos, que, al fin y al cabo, somos los grandes olvidados de cualquier Gobierno que pise La Moncloa.