El arte y la habilidad de negociar

04 may 2016 / 17:00 H.

Los letrados conocemos bien la habilidad en el trato y la conjunción de intereses, es algo que se cultiva, en lo que hay que mostrar voluntarismo finalista aunque sea con algo de teatralidad, pero con objetivo verdadero. Sin embargo, no parece que cunda esta facultad en nuestros líderes parlamentarios, deben hacérselo mirar, pues todos hemos visto enemigos íntimos acordar lo imposible, naciones que se masacraron ahora se miran en busca de paz, concordia y prosperidad, o como nuestra transición democrática nos hizo grandes ante el mundo, precisamente aplicando negociación, cesión y pacto. Ahora, partida de chiquilicuatres, sin oficio conocido ni reputación que defender, falsean sin rubor para dar gusto —según ellos— al oído de sus votantes. Ahora que parecía salíamos de la hondura no son capaces de concordar nuestro bien no mereciéndose donde los hemos situado. Hemos tenido sentados en las Cortes —por suerte poco tiempo— lo que nos merecemos, que es a quien votamos. Acaso, “aparatos de partido” ¿no os dais cuenta de la pobreza de los elegidos? No me lo puedo explicar.