El tabú que mata

02 mar 2017 / 17:27 H.

Que la vida sea un continuo aprendizaje, no hay duda. Aprendemos a vivir con cada una de nuestras circunstancias y cuando la vida está en juego dejamos de darle prioridad a lo que nos resta o no merece atención. Hasta que no vemos de cerca nuestra fragilidad, no vemos nuestra vulnerabilidad. Nadie es inmortal. La inmortalidad solo existe en el recuerdo de lo que permanece. Hay muchas causas que son batalladas y, por ello, hay que darse cuenta de lo importante que es vivir. Pablo Ráez luchó hasta el último momento, de tal manera que su ejemplo ha servido para que haya un aumento en las donaciones de médula ósea. Sus mensajes positivos han ayudado a otras personas que viven de cerca la leucemia. No hay que tener miedo a la muerte pues forma parte de la vida y no hay que posponer lo que nos hace vibrar, pues el tiempo se nos puede ir de las manos como de la vida. Afrontar la muerte debería ser asignatura necesaria en la enseñanza, pues es el tabú que finalmente mata.