El taxi

03 feb 2019 / 11:20 H.

El taxi es considerado un servicio público imprescindible. El problema de la huelga se hace público y llega a ser una preocupación nacional cuando tiene lugar en Madrid o en Barcelona como ocurre en estos días. Los taxistas son unos profesionales que han accedido a un sector “fuertemente regulado” por las administraciones, pagando una licencia altísima. De un tiempo a esta parte ven como desde multinacionales les están comiendo el pan de sus hijos. Conductores con contratos basura se han asentado junto a ellos con descaro y con una presencia feroz. Los llamados VTC han tenido un éxito sin precedentes: mucho agrado y una botellita de agua. La competencia es buena y deseable. Los taxistas se están equivocando en las formas pero en el fondo llevan razón. Esto es lo decisivo. La Administración tiene que favorecer un calendario progresivo “de acople” con medidas temporales y a largo plazo. Tarde o temprano tendrán que competir casi en igualdad. Hasta que llegue ese momento no hay más solución que limitar el número de licencias VTC para que operen “sin hacer trampa”. Así pues que nos dejen vivir, respirar y un poquito de agua.