En blanco y negro

14 ene 2019 / 11:24 H.

L os seres humanos caminamos por el mundo con nuestras luces y nuestras sombras, lo hacemos al amparo de una mirada que sepa distinguir la claridad de la oscuridad, que sitúe el perfil exacto de nuestra figura en el margen que divide lo etéreo de lo físico, la realidad de la fantasía, lo visible de lo invisible. Si alguien hay en nuestra provincia que trabaje como nadie la luz, es la fotógrafa Yolanda Ogayar. Ella es capaz de sacar de los cuerpos lo intangible jugando a la perfección con el blanco y el negro, recreándose en el arco iris de los grises para hacer de cada imagen una exhibición de su fortaleza tras de la cámara, la exactitud. Yolanda no se anda por las ramas, es una artista versátil que se deja caer en los diferentes géneros de fotografía, es especialmente ágil tratando el desnudo y sus retratos cobran singular importancia al describir de forma excelsa la personalidad de sus retratados. Por si todo esto fuera poco, la artista co-dirige la Escuela de Fotógrafos en la ciudad de Jaén donde imparte clases y talleres de formación en fotografía, enseñando, si es que eso fuera posible, el entramado mágico que transcurre desde que el ojo ve a través del objetivo hasta que finalmente se obtiene la imagen. A Yolanda Ogayar.