Jaén, divergente de Andalucía

Dicen que todo se mide en términos comparativos, y si mal nos vemos cuando la economía de la provincia no crece, peor nos sentimos cuando vemos que el resto de provincias empiezan a respirar aires de recuperación. Recientemente, hemos conocido los datos de la Encuesta de Población Activa del primer trimestre, normalmente propicia para nuestra provincia, más este año que auguraba una buena campaña oleícola. Respecto a la tasa de paro, nos situamos por encima de la media Andaluza, y sólo por debajo de las provincias de Huelva y Cádiz, que esperan en los dos próximos meses crear empleo en el sector turístico. Las expectativas para el segundo y tercer trimestre son de farolillo rojo. Igualmente, el reciente informe de la Fundación Analistas Económicos de Andalucía, augura para nuestra provincia el crecimiento más lento de 2016. En la mayoría de los datos económicos analizados, Málaga lidera la primera posición, mientras que Jaén, se sitúa octava, por no decir última.

Concretamente, Jaén es la única provincia en Andalucía donde el empleo ha disminuido, la que más tasa de temporalidad tiene en sus contratos de trabajo, la de mayor incremento en el número de parados de larga duración, y la única de Andalucía en la que ha disminuido el número de empresas afiliadas a la Seguridad Social (-8,2%, frente al +1,3%). Como datos positivos, destacar el incremento en el número de viajeros alojados, el de matriculación de vehículos, o la mejora del sector inmobiliario, que no llega a significar mejora de la construcción, pues el incremento ha sido por la venta de viviendas usadas, descendiendo las nuevas un 10,2%. La situación exige la ejecución de un plan de emergencia, basado en un incremento de la inversión pública, el estímulo de la inversión privada, y la orientación a una mayor competitividad de nuestro menguado tejido empresarial. Todo sin olvidar que no siempre los datos referidos al crecimiento, reflejan en mejor medida el desarrollo de un territorio, toda vez, que debe corresponderse con el bienestar social y la convergencia con el resto de Andalucía.