Jaén y aquella Expo 92

23 abr 2017 / 11:18 H.

Se ha cumplido esta semana un cuarto de siglo de la famosa Expo 92. Para los que vivimos aquel evento desde esta provincia, no significó más que una viaje a Sevilla para ver cosas espectaculares que ni soñábamos que existieran. El colofón del espectáculo del lago nos hacia regresar exhaustos pero colmados de una rara sensación de felicidad. Para Jaén, además de excursiones, apenas nada supuso, si acaso una nueva oportunidad perdida, una más. El noventa y dos significó el abandono del ferrocarril por nuestras arterias provinciales. Solo obtuvimos las migajas de una autovía que, ineludiblemente, había de discurrir, por la premura de tiempo, aprovechando el trazado de la antigua N-IV. Esta semana, en Sevilla, se ha celebrado la efeméride con pompa y boato, con toda lógica porque a pesar de todo lo que nos vendieron, fue eso, una cosa de la capital andaluza. Otro momento único que volvimos a perder. Con la Expo, como con todo, no se cristalizaron medidas compensatorias para Jaén. Eso si, muchos guardamos aún un álbum con fotos de la Isla de la Cartuja, Curro incluido.