La didáctica del aceite

21 jun 2016 / 18:00 H.

No hace tanto tiempo que nuestros olivareros tenían la costumbre de utilizar como marca comercial de los aceites el mismo que el de sus cooperativas. Eso hizo que, curiosamente, medio santoral acabara repartido piadosamente por las etiquetas de las botellas y garrafas de aceite, mientras que los buenos gerentes de nuestra provincia se alojaban en el obispado. Debió advertirnos Santa Teresa del mismo modo, que también entre las alcuzas anda Dios. Tuvieron que ser los expertos en marketing los que nos alumbrarán que palabras como “amargura”, “angustias” y “dolores”, por muy piadosas que resulten cuando acompañan a una determinada advocación mariana, no dejan de provocarle al consumidor extranjero un cierto repelús gástrico al serle traducidas a su idioma. A fin de cuentas, el corazón y el estómago, aún estando muy próximos, poseen cada uno de ellos particulares querencias espirituales y humanas debilidades. Qué difícil le ha resultado al ambiente academicista del olivo desprenderse de unos prejuicios que siguen considerando la Gastronomía como un arte menor, más lúdico que científico. Aún no hemos dado en la tecla para unir dos aspectos fundamentales: El “incordio” de comer sano, que propugnan los médicos y los nutricionistas, no está reñido en absoluto con el placer de comer “moderadamente insano” que defienden los gastrónomos, siendo imprescindible encontrar el punto de equilibrio entre ambas posturas. El fin último del aceite de oliva virgen extra, no lo olvidemos, es ser ingerido, más que como un “medicamento” al uso, como un placentero y saludable deleite para el paladar. El reto, ahora que se ha puesto a funcionar la liturgia gastronómica del aove a través de los aceites premium, es hacer una eficaz didáctica hacia el consumidor sobre calidades, variedades, maridajes y ventajas saludables del aove, de una forma sencilla y entendible para el gran público: Consumir y regalar aceite de oliva virgen extra es una opción muy saludable gastronómicamente y bastante rentable económicamente.