La revolución de las ‘mujeres reales’

Jaén se ha sumado a la movilización y la huelga por el 8-M, tachada por el Gobierno de “élites feministas, no de mujeres reales” >> La chispa ha prendido especialmente en España, donde el Gobierno tiene cada vez más frentes abiertos en las calles >>

11 mar 2018 / 11:10 H.

No hemos sido una excepción, Jaén ha estado a la altura y se ha plantado a la cabeza en movilizaciones por el Día de la Mujer. Desde todos los rincones de la provincia llegaron ecos de que la mancha de la igualdad cada vez impregna mayores cotas, que la dignidad de la mujer marcha a hombros de una mayoría silenciosa de mujeres reales que la hacen imparable. Mujeres reales, anónimas para las élites políticas; mujeres con una historia de principios forjados a base de desaires y desconsideraciones, con sueldos menores y con trabajos no tan rimbombantes para la élite social que todo lo controla y todo quiere tenerlo controlado. Es sintomático cómo en España ha cuajado más que en ningún otro lugar del mundo la celebración festiva y la huelga reinvidicativa del 51 por ciento de la población. La revolución no hay quien la pare.

Cuando los gobiernos y los partidos que los sustentan no hacen más que justificarse por lo que tienen encima, de descontrol y desazón, no están más que alejándose de la realidad y, con ello, asaltan de forma permanente el sentido común. Cómo es posible que el Gobierno se desmarque de una movilización que solo habla de derechos, además consagrados en la Constitución a la que tanto apela con Cataluña. Y lo que es más sangrante, humana y políticamente, cómo puede el Gobierno y su partido mentor decir que el 8-M era una huelga “de élites feministas, no de mujeres reales”. Ha sido posible y así tiene el Gobierno las calles, llenas de descontento y crispación, valga como ejemplo el sustento principal de su electorado, los nueve millones de pensionistas y la carta de una ministra que se vanagloria de haberles subido un 0,25 por ciento mientras que el Índice de Precios al Consumo está disparado. Las ‘mujeres reales’ de Jaén se echaron a la calle y refrendaron la movilización mundial en una jornada que marcará un hito en la historia, camino del fin de esa revolución imparable que ha de colocarnos en la posición de salida de la igualdad. Quien no se haya sumado al deseo y a la necesidad es que no vive en el mundo, ese (o esa) sí que es una élite.