Lo importante y lo influyente

21 dic 2016 / 12:17 H.

El pasado sábado Diario JAÉN rindió un homenaje al mundo solidario, a todas esas organizaciones no gubernamentales de nuestra provincia que trabajan por un mundo mejor. El acto estuvo apadrinado por el padre Ángel, fundador de “Mensajeros de la Paz”, que, con un discurso brillante, entre otras cosas distinguió entre lo importante y lo influyente: “Lo importante no tiene que ver con lo influyente, lo influyente lo encontramos siempre en los periódicos: futbolistas, actores, entre otros. Lo importante está en personas que duermen en la calle”. En nuestra provincia existen más de 220 asociaciones que, con las manos de sus voluntarios, trabajan en lo importante. En el ámbito de la sanidad, la educación, el duelo por la pérdida de un ser querido, los sin techo, las limitaciones físicas o psíquicas, son muchas las personas buenas que ayudan a “poner luz en la oscuridad”. Aquí, en nuestra realidad más cercana, o traspasando fronteras hacia países lejanos en los que el prójimo no está próximo, pero muy cerca de sus corazones, el trabajo de los voluntarios engrandece al ser humano y dan ejemplo de valentía, coraje y esperanza. Las puertas de la felicidad se abren hacia fuera, y bien que lo saben todos los que trabajan en estas asociaciones que, a diario, se afanan por mitigar tanto dolor y sufrimiento que demasiadas personas sufren porque el pensamiento predominante está en lo influyente y no en lo importante. También nos dijo Juan Espejo, director de este Diario, que vivimos en un mundo donde “lo más importante es lo urgente y no lo transcendente”. Se vive con demasiada prisa para llegar a ninguna parte, para conseguir excesivas cosas materiales o simplemente para ser más y mejor que el otro. Por ello es justo reconocer el trabajo de estas ONGS que son capaces de tocar los corazones y llegar muy lejos; que son capaces de transcender a lo urgente e influyente y ocuparse de lo importante; que son capaces de transmitir vida a quienes carecen de razones para vivir. Ojalá crezca la sensibilidad y aumenten las personas que dediquen algo de tiempo a construir un mundo más solidario.