Me gusta el comunismo de Fidel

El corazón a la izquierda y el bolsillo a la derecha. Esto me lo confirmó el periodista Raúl del Pozo cuando dijo que él votaba a la izquierda y que jugaba al golf, deporte no precisamente de pobres, pero que luchaba para que todos pudiésemos practicarlo. A punto estuve de un subidón de adrenalina viéndome en Sotogrande con el carrito detrás acompañada de Ana Rosa Quintana. Ahora que es noticia la muerte del dictador cubano, recuerdo el libro de Juan Reinaldo Sánchez “La vida oculta de Fidel Castro”, donde cuenta con detalle el lujo del que estaba rodeado y la fortuna que había amasado (900 millones de euros), mientras exigía grandes sacrificios a su pueblo. Controlaba más de una docena de empresas, pero un cubano cobra 22 euros al mes, de manera que necesita trabajar 21 meses para comprar un televisor. A su isla privada, Cayo Piedra, invitaba a su amigo Gabriel García Márquez a pasear en su yate. Resumiendo, ese es el comunismo que me va, el de Fidel Castro.