Otiñar Mágico

23 may 2016 / 10:09 H.

Dicen que existen lugares mágicos, pero en realidad son solo parajes que encierran emociones. La magia está en el momento que esas emociones pasan de ser atributos individuales a construcciones sociales, es en ese momento cuando esos lugares adquieren la capacidad de conmovernos y representan lo que somos. El filósofo Emilio Lledó nos define como seres con memoria, lenguaje y sentimientos. También somos el lugar que habitamos, el valor, la cultural, la historia, la memoria de esos lugares es lo que nos convierte en lo que somos y de donde somos. Otiñar es uno de estos lugares mágicos, tan cercano como desconocido. Un grupo de activistas constituidos en la “plataforma de Otiñar”, han hecho de su empeño virtud y ha conseguido que conozcamos y reconozcamos ese lugar. Que contemplemos de su grandeza y belleza, que conozcamos su esencia, su historia. El resto lo ha hecho el paraje, su capacidad de enamorar a todo el que transita por la ladera de su castillo. De seducir con el aroma y el sonido del viento que a modo de susurro trae bonitas palabras cargadas de sentimientos en esa capsula del tiempo, que es nuestro tiempo.