Otra mirada

Mañana en sus ojos se define la ilusión. Noche mágica de los sueños y del poco sueño. De oír los pasos que solo ellos distinguen. La sorpresa los pondrá ojipláticos y boquiabiertos. Nos enseñarán a creer, a soñar, a ilusionarse y a encajar desilusiones, a sacar su mayor regalo para disfrutarlo, no para engreírse, a alegrarse del bien ajeno. Veremos que no prejuzgarán a los otros por su apariencia ni por el precio de sus regalos... Y como siempre nos enseñarán lo sencillo que es perdonar sin rencor, a no tener miedo a equivocarse, ni al que dirán, a no abandonar hasta lograr un sueño. Pero crecerán, y los malearemos. Y lo peor es que el equilibrio se ha roto. Cada vez son menos. Las cifras del INE son aterradoras. Como en la postguerra, o 1787 para nacidos de madres nacidas aquí. La sociedad envejece en cifras, pero también en actitud y valores. Perdemos el futuro y la ilusión. Queridos Reyes Magos, traednos políticas de apoyo a la maternidad, a la conciliación, cambios de mentalidad, generosidad y buenos gestores para el relevo generacional; traednos sueños, y perseverancia para lograrlos, o a este ritmo se acabarán las cartas para tal noche como la de mañana.