Otro de bloques

03 ene 2018 / 09:56 H.

No pareciese que se han caído ya demasiadas torres del Castillo de Santa Catalina al centro de la ciudad? —idea argumentadora ésta del diseño arquitectónico del Teatro Infanta Leonor de la capital—, porque claramente podemos afirmar que existen nuevos desprendimientos de la fortaleza catalina que ha parado justo sobre la antigua prisión, menos mal que han tenido el detalle de cambiarle el color a los patuscos. Como esto siga así nos van a poner Legoxauen o Jaentente. ¡Cuadriculados los alemanes!, me río yo, están los tiralíneas en Furnieles a millón ahora que estarán diseñando el Palacio de Justicia. Me perdonen el atrevimiento los entendidos de la arquitectura y el urbanismo postmoderno, pero hacer por hacer todos los edificios públicos nuevos parecidísimos dice muy poco del inventor de la idea si no es porque exista una nueva visión de la ciudad que aún no se nos ha explicado, esto es, si hay que dar un carácter o una impronta al estilo visual bien, pero que sea porque hay un plan, de lo contrario me quedo con Vandelvira.