Privatizar
las calles

Hay zonas de Jaén que parecían que habían sido pensadas para los peatones, para la ciudadanía que gusta de pasear o simplemente de cruzar Jaén para llegar a algún sitio. Hoy, en algunas zonas, esto es un reto. El Ayuntamiento de la capital se ha empeñado en privatizar las calles, las plazas y, en definitiva, cualquier acera que se precie. Aceras grandes en el Bulevar para que los y las jiennenses tengan que pasar en fila porque todo está ocupado con las mesas y las sillas de las terrazas. Plazas como la de San Ildefonso donde ya no se puede parar ni los más pequeños a jugar porque hay extensión de bares. Calles que nos conducen a nuestra gran Catedral que no permiten el paso de nadie, porque todo es terraza... Con esto no pretendo ni quiero decir que el sector hostelero tenga la culpa. Ni mucho menos. Aquí todo el mundo tiene el derecho a ganarse la vida. Pero es que lo de nuestro Ayuntamiento es muy fuerte, que parece repartir licencias como si no hubiera mañana, y a cambio veta otros proyectos que movilizarían Jaén. No entiendo pues por qué lo hace. ¿O sí? Poderoso don dinero, que no sabemos dónde va.