Tahúres de las palabras

26 feb 2017 / 11:25 H.

Estos días acabará la recolección de la aceituna. Los datos de desempleo volverán a ser negativos. Oiremos que es debido a nuestra secular estacionalidad. Cuando hace unas semanas salieron sacando pecho de bajadas significativas, se arrogaron buen proceder en sus políticas. España es muy de costumbres, de “sostenella y no enmendalla”. Aquí cuando algo sale bien es porque el que dirige es divino, cuando vienen mal dadas se buscan culpables donde fuere y mil triquiñuelas lingüísticas justificando. En Jaén estamos hartos ya de políticos obcecados en planteamientos de puro servilismo a sus siglas y poco arraigo en sus representados. El problema del desempleo tiene más que ver con la dejadez inversora que con la estacionalidad, por mucho que los olivos sean fundamentales. Jaén necesita inversión pública, al mismo nivel o más que provincias cercanas. El diferencial, en negativo, viene de no invertir lo debido en redes de regadío, ferrocarril, carreteras, etc. Bien harían los magos de la palabrería en fijarse como objetivo único a Jaén y no echar balones fuera.