Tributación fantasma

Reflejo mayúsculo de insolidaridad es el uso de las sociedades pantalla o empresas fantasma, definidas como aquellas meramente instrumentales carentes de actividad económica, que se crean con el objetivo de eludir impuestos, dejando de contribuir en el país de origen mediante ingeniería financiera. Les sonarán esos espectros tributarios tras la noticia conocida del apego de muchos de nuestros sujetos pasivos para con la Hacienda panameña en perjuicio de la nacional, justo ahora que iniciamos el período de renta, ¡vaya acierto para el lumbreras que filtrara la información!. Ya se ven los carritos del helao por los despachos de los asesores y sus falsas explicaciones. Pero eso, precisamente, es de lo que se trata estas pantallas fiscales, no tener actividad pero sí atribuirse los ingresos que no tributan, donde se han generado para hacerlo mínimamente en el paraíso fiscal. No cunda este mal ejemplo, pues hospitales, colegios, carreteras y tantos servicios con los que contamos no vienen debajo de las tapas del yogurt. ¡A por ellos!