Un Jaén de futuro

28 ene 2019 / 11:56 H.

Con los raíles templándose y las catenarias calentando el contador, mil conflictos después (esperemos que no se hundan las ya maltrechas arcas locales y no nos cueste uno de los antiguos duros al populacho), recibimos la esperanzadora noticia de que nuestra carrera de San Antón pudiera ser Fiesta de Interés Turístico Nacional. En sábado, entre semana o el día que sea. Buscando su sitio en ese inmejorable entorno, la mejor Catedral del mundo, el World Padel Tour repetirá y nos hará vibrar con cada volea, fomentando a su vez ese preciado tesoro intrínseco, que es el turismo, y que tanto, tanto trabajo nos cuesta apreciar, vender y ofrecer. Siendo la capital mundial del aceite de oliva, con nuestra provincia número uno en castillos de Europa, con los más relajantes y Naturales Parques, pantanos, rutas, una gastronomía envidiable, y hasta una estrella Michelín, que reluce, Baga-me Dios, en la constelación de grandes maestros culinarios que nos abastecen de manjares, e infinidad de “cosas” por ofrecer al mundo entero... lo lograremos. Saldremos del bache y seremos referentes. Solo falta que los parásitos morales, esos que le ponen pegas a todo, se callen o pasen al carro de la productividad, ya que el jiennense, crítico por naturaleza, se siente orgulloso de serlo. Habrá que recordárselo.