Un aniversario de homenaje

Se cumple el primer aniversario del atentado terrorista de La Rambla de Barcelona que acabó con la vida de 16 personas y causó cientos de heridos. Junto al pánico en la Ciudad Condal se dejó una herida abierta de vulnerabilidad que siempre deja su estela en cualquier ciudad que sufre el hachazo terrorista. Entre el propio atentado y la huida sangrienta de los terroristas en Cambrils el reguero de temor se expandió por toda la comunidad y sacudió al resto de países dada la nacionalidad de las víctimas. Con los hechos aún frescos en la memoria, el nacionalismo aprovechó la presencia de cargos institucionales del Gobierno y de la propia Corona para convertir la manifestación de repulsa en otro acto para su causa, sin respetar el duelo por las víctimas y el dolor compartido con el resto de españoles que estaban representados por dichos cargos. Esta semana se cumple el triste aniversario y durante días las asociaciones nutridas del presupuesto independentista han barajado diferentes escenarios de “conflicto” para convertir el homenaje en otra acto reivindicativo para su causa. Está por ver si como parece no harán ningún tipo de proclama durante el acto, aunque hay “facciones” como los Centros de Defensa de la República que no se posicionan y pueden dar la nota para escarnio de las familias de las víctimas, para una buena parte de la sociedad catalana y para el resto del país que comparte, como no podía ser de otra forma, el dolor que sufrió Cataluña. La deriva del Gobierno de Torra explica también que mientras unos optan por el recato, esta vez, haya quien siga al pie de la letra los desplantes de un presidente que está acostumbrado a calentar a los suyos, despreciando al resto de gobernados.