A juicio un falso empresario por una estafa de 25.000 euros

Está acusado de hacerse pasar por miembro de la seguridad del Rey

09 dic 2016 / 12:41 H.

Juan T. B., un jiennense de 55 años, tiene una cita con la Justicia la próxima semana. Está acusado de estafa. Un supuesto fraude en el que, según la Fiscalía, puso en marcha la puesta en escena del falso empresario. Presuntamente, se hizo pasar por el gerente de una importante sociedad y consiguió que la víctima —un empresario de Martos— le entregara 25.000 euros para un negocio inexistente. “Se presentó como un acaudalado empresario de alta categoría, que embaucó a mi cliente con sus gratas palabras y los beneficios que arrojaba un negocio que sería muy fructífero y beneficioso”, relata el escrito provisional de cargos presentado por la acusación particular contra Juan T. B.

Los hechos se remontan a enero de 2013, cuando el procesado se personó en la sede de la empresa de la víctima y, “tras una larga conversación”, lo convenció para embarcarse en un proyecto empresarial. Para ello, el perjudicado tendría que aportar 25.000 euros en efectivo. A cambio, recibiría dos pagarés que vencían en marzo y en abril de ese año y que doblaban la inversión inicial. Cuando el empresario marteño fue a cobrarlos, descubrió que no tenían fondos, tal y como explican las acusaciones. Por todo ello, imputan a Juan T. B. por un delito de estafa. La Fiscalía reclama un año y seis meses de cárcel, mientras que el perjudicado solicita dos años y medio de prisión.

No es el único caso que tiene pendiente este jiennense. Todavía debe sentarse en el banquillo por un episodio similar. Presuntamente, estafó a un empresario linarense, al que sacó 10.000 euros haciéndose pasar por miembro de la seguridad del Rey. Estos hechos ocurrieron en junio de 2013. El fiscal asegura que Juan T. B. aparentó una situación de solvencia ante la víctima “para conseguir un préstamo que no pretendía devolver”. ¿Cómo lo hizo? El Ministerio Público asegura que se presentó como coronel del Ejército perteneciente a la unidad de seguridad de Su Majestad el Rey don Juan Carlos de Borbón. Además, también dijo ser un “reputado empresario”, según siempre el escrito de acusación provisional. Con esta puesta en escena, Juan T. B. se ganó la confianza de un industrial de Linares, al que pidió un crédito de 10.000 euros. El acusado, al parecer, aseguró que necesitaba el dinero para viajar a Centroamérica para recoger una importante suma de dinero procedente de un juicio que había ganado, y por el que le correspondían 4,5 millones de euros. La víctima picó el anzuelo que, presuntamente, le puso Juan T. B. El 20 de junio de 2013, le hizo una transferencia a una cuenta de una oficina bancaria de Linares que el acusado abrió al efecto. “Desde ese momento, el procesado dejó de contestar las llamadas y los mensajes del empresario, haciendo suyo el dinero”, concluye la Fiscalía, que pide un año y medio de cárcel. La defensa niega todos los cargos.