Contactos para la reforma del número 7 de Navas de Tolosa

Solo hay que sentarse y pedir un café y una tostada o un “chockychurro”, el churro con chocolate especialidad de la casa, para enterarse de que algo se mueve en el número 7 de la céntrica calle Navas de Tolosa, la última ubicación de la Cafetería Colón. El edificio será reformado, como confirma el propietario del establecimiento y el inmueble, Francisco Moreno. Actualmente, el único “inquilino” de esta finca es el establecimiento de hostelería, uno de los más veteranos y concurridos de la ciudad, los profesionales que ocupaban los despachos y los residentes ya se marcharon. Francisco Moreno, eso sí, por el momento solo confirma que se acometerán obras y que hay conversaciones para ello, sin dar más detalles. Entre los clientes se comenta la posibilidad de que la cafetería se mude a otro local mientras se acomete la transformación, incluso, se habla de uno en una vía próxima que, actualmente está sin uso, pero Moreno, que ayer no se encontraba en la cafetería por cuestiones de trabajo, por el momento, prefiere ser discreto al respecto y mantiene una prudente cautela.

La marca “Colón” comenzó su trayectoria en el año 1962, en la calle Álamos esquina con calle Colón. De ahí su nombre, aunque el establecimiento pasó por varios enclaves hasta llegar al actual, Navas de Tolosa, en el que no cesa la actividad, ya que abre todos los días de la semana, desde las siete de la semana a las diez de la noche, como así se anuncia en su página web. Está en el centro de la calle en la que, hasta no hace mucho, no tenía competencia. Sin embargo, ya hay dos nuevos negocios de su rama, que también cuentan con una amplia terraza, en esta arteria, en la que apenas hay tráfico rodado, por lo que se presta a la costumbre de desayunar y comer fuera de casa.

Las obras que se anuncian en el número 7 de Navas de Tolosa se sumarán a otras que hay en marcha y que, en algunos casos, están a punto de concluir en Jaén, como las del edificio de la calle Santo Reino, esquina con Reyes Católicos, el que albergó el Bodegón, en la Plaza del Pósito, y la acometida en otro esquinazo, esta vez, en la Plaza de San Francisco. A estos hay que añadir la intervención integral que está en marcha en la Casa del Reloj, en la Plaza de Santa María y la inminente que se anuncia en el Palacio del Vizconde de Los Villares, en la Carrera de Jesús y la que fuera sede de Banesto, en Roldán y Marín, esta última, aún pendiente de licencia urbanística.