Denuncia por “emparedar” a dos perros y dejarlos morir

Un juez investiga al cuidador de los animales, que fallecieron “de hambre y sed”

25 ene 2018 / 09:46 H.

Un juez jiennense investiga a un vecino de Martos por un supuesto caso de maltrato animal. Presuntamente, el hombre encerró en una pequeño habitáculo a los dos perros a los que debía cuidar y los dejó morir de hambre y sed. Así, al menos, lo ha denunciado el propietario de los animales, Juan Ventura. “Estoy destrozado, porque eran como mis hijos”, explica este hombre de 31 años, que se encuentra desolado por lo ocurrido. El dueño de los canes, de raza “American Stanford”, explica que guardaba a sus perros en la planta baja de una casa. “Por circunstancias, tuve que viajar a Barcelona para cuidar de mi abuela, que está enferma. Así que hablé con un amigo y le pedí que atendiese a los animales durante mi ausencia”, relata. Y añade: “Le di cien euros a cambio”. No obstante, según Juan Ventura, el cuidador se desatendió por completo. Es más, asegura que encerró a los perros, llamados “Jack” y “Lola” en un pequeño habitáculo de apenas dos metros cuadrados, “un agujero que tapió completamente”. El dueño asegura que telefoneó al ahora investigado para preguntarle cómo estaban los canes: “Me dijo que estaban bien, cuando ya llevaban varios días muertos”, asegura. Cuando regresó a casa, le confesó que los animales habían fallecido y que sospechaba que alguien les podía haber echado veneno. Sin embargo, Juan Ventura sospecha que “Jack” y “Lola” murieron “de hambre y de sed”. “Estaban desnutridos, prácticamente en los huesos. Cuando yo llegué a la casa, los cadáveres se encontraban ocultos en un pequeño espacio, emparedados por un somier y con todos los respiraderos tapados”, agrega.

Por ello, contactó con el abogado jiennense Juan Manuel Jiménez, que interpuso la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil. Juan Ventura aportó a los agentes una serie de mensajes que, al parecer, le envío el cuidador de los animales y en los que confesaría parcialmente los hechos. De momento, fuentes del Instituto Armado confirman que han recibido la denuncia y que se está investigando en diligencias judiciales.

El dueño de los perros asegura estar “muy dolido”. “Mi impresión es que no acudió a cuidarlos ni un solo día y que murieron de hambre y de sed. Cuando yo descubrí los cuerpos, se me vino el mundo abajo. Llevaban muchos días muertos y estaban envueltos en suciedad y cubiertos de agua, porque había llovido y nevado en esos días”, concluye.

De enorme valor sentimental

Juan Ventura asegura que compró a los dos perros cuando eran cachorros. “Lola” era la hembra y le costó unos 200 euros. “Jack” era el macho. Tenía un ojo de cada color, por lo que su precio era más alto: “Para mí, esos animales tenían un valor incalculable. Eran como mis hijos. No quiero nada. Solo que estas situaciones no se repitan más”.