Descubierto un poblado del Cobre en Villardompardo

Las casas-cueva halladas son similares a las de Marroquíes Bajos

01 ago 2017 / 12:09 H.

La Historia comienza con la invención de la escritura, pero antes que los garabatos, signos, letras y tratados de ortografía, todo el pasado desde la noche de los tiempos, está escrito en la tierra. Y para muestra un botón. Las últimas excavaciones arqueológicas realizadas en el castillo de Villardompardo, dentro del proceso de restauración de esta fortaleza medieval, han desvelado algo que ni propios ni extraños sospechaban: un pasado prehistórico soprendente. Los trabajos realizados por el Grupo Tragsa, en colaboración con la Universidad de Jaén, han puesto al descubierto un poblado calcolítico, es decir, de la Edad del Cobre, de 4.500 años de antigüedad.

“Han aparecido unas casas-cueva que, según los expertos son muy similares a las excavadas en Marroquíes Bajos de Jaén”, comenta el alcalde de Villardompardo, Francisco López Gay. Pero aun hay más. También se ha encontrado un paño de muralla ibera y dos cisternas de agua de época romana.

Esto, tratándose de la provincia de Jaén, no debería de llamar la atención, pero tratándose de Villardompardo sí. “Se sabe que el castillo fue construido en el siglo XIII y creemos que por los castellanos en 1245. también que nuestro pueblo es de época medieval, pero esta excavación demuestra que es mucho más antiguo. El castillo fue adquirido por el Ayuntamiento hace una docena de años y ya se ha excavado todo el interior. Se han hecho unas catas fuera y se van a hacer más, para saber si hay algo que valga la pena conocer”, precisa el alcalde. Añade que esta intervención, llevada a cabo por Tragsa con el apoyo de la Universidad de Jaén, forma parte del proceso de restauración del castillo, con cargo al 1,5% cultural del Ministerio de Fomento. “El Estado aporta el 70 por ciento de la restauración, la Diputación un 12,5%, la Junta de Andalucía otro 12,5% y el Ayuntamiento de Villardompardo el 5% restante”, aclara Francisco López Gay. “Nuestra intención es resturarlo, ponerlo en valor, abrirlo a vecinos y visitantes e incluirlo en la Ruta de los Castillos y las Batallas, a la que aún no pertenecemos por no ser un monumento histórico visitable”, asegura.

El castillo-palacio del siglo XIII situado en la zona más oriental de Villardompardo fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC). Presenta preocupantes deterioros en sus restos, por lo que desde hace un año el Grupo Tragsa trabaja en su rehabilitación. Esta empresa de arqueología explica que durante esta intervención mientras se excavaba en la zona donde se encontraban el antiguo palacio renacentista y las caballerizas, se descubrieron unos hallazgos acordes con la época del castillo. Al excavar en la zona del patio se halló, con la consiguiente sorpresa para el equipo de arqueólogos, un poblado del Calcolítico de 4.500 años de antigüedad, murallas íberas y cisternas romanas, “que rompen con la creencia de que el primer asentamiento fue cristiano”. Tragsa añade que la primera fase de estas excavaciones comenzó en octubre de 2016 y tuvo una duración de dos meses. En marzo de este año se inició una segunda fase que finalizó en junio, dando así por concluidos los trabajos de excavación.

Junto con los trabajos de excavación se rehabilitó la torre del homenaje, se restauró la muralla perimetral y se construyó un edificio nuevo. El Castillo de Villardompardo fue comprado en 2006 por el ayuntamiento de este municipio, pasando así a ser de titularidad pública. La primera mención expresa de Villardompardo se remonta a 1245 y alude a su conquista y repoblación por parte de Fernando III El Santo. El rey donó lo que entonces era una pequeña alquería a uno de los nobles que lo acompañaban: Pedro Aznar Pardo, de quien recibió su nombre El Villar de Don Pardo.

El hallazgo de elementos arqueológicos anteriores a la Edad Media como hachas neolíticas, pilas romanas o pavimentos de ladrillo, indica una ocupación más antigua. También se han encontrado vestigios de poblamiento en los alrededores de este municipio jiennense.