El gran embrollo ibero

El alcalde convocará cuanto antes la Comisión de Seguimiento

23 jun 2017 / 12:22 H.

La construcción y apertura del Museo Ibero en Jaén no solo acumulan más de una década de retraso. Con la infraestructura acabada, tras una inversión que supera los 20 millones de euros del erario público andaluz, y en pleno proceso de traslado de piezas desde el Museo Provincial, aún está por ver que pueda inaugurarse —aunque sea de forma parcial con una exposición temporal— el próximo otoño, como pretende la Junta en el último de los plazos que ha dado.

El motivo de tal incertidumbre es la titularidad de los terrenos. Pese a que, en marzo del año pasado, el alcalde, Javier Márquez, tomando distancia respecto a su predecesor, afirmó que no habría trabas para que el Ayuntamiento cediera la propiedad del suelo a la Junta. “No tenemos que ser titulares de un bien que está construyendo otra Administración”, razonó entonces. La Abogacía del Estado lo corrige en un informe y —según el regidor— resuelve que “no puede ceder la titularidad del terreno puesto que”, de acuerdo con el convenio suscrito en 2004 entre el Estado, la Junta, la Diputación y el Ayuntamiento, “este suelo era para la ciudad”. Ese acuerdo permitió que la Administración local se hiciera con la titularidad del solar de la cárcel vieja, pero a cambio de, “simultáneamente”, “ponerlo a disposición” del Ejecutivo autonómico para que este lo rehabilitara y acondicionara para levantar el Museo de Arte Ibero. Esa “puesta a disposición” es la que debe sustituirse por una cesión de la titularidad porque la legislación actual exige que, para certificar el final de una obra, la propiedad del suelo también sea de quien ejecuta el bien. Esto es de lo que carece la Junta y el embrollo burocrático y el perjuicio económico y social pueden ser de los que hacen historia, si no se llega a un acuerdo.

Alcanzarlo “cuanto antes” es lo que persigue el alcalde, que, después de plantear a la Junta la cesión de la gestión de la infraestructura, manteniendo la titularidad municipal del suelo, ante el rechazo rotundo del Gobierno andaluz, anunció que convocará, “a la mayor brevedad”, la Comisión de Seguimiento del Museo de Arte Ibero, en la que están representadas las cuatro administraciones.

“Hemos de sentarnos a buscar la mejor solución posible para que, salvaguardando los intereses de todas las partes y teniendo en cuenta el convenio firmado en su día, podamos contar con el Museo de Arte Ibero”, expuso en un comunicado. Después de la manifestación histórica del pasado sábado, de la que han tomado nota todas las administraciones, reconoció: “Los ciudadanos nos están demandando soluciones y tenemos que ser capaces de llegar a acuerdos para que Jaén cuente con las inversiones e infraestructuras que merece”.

Por su parte, la delegada del Gobierno andaluz, Ana Cobo, esgrimió a favor de la Junta que el Museo Ibero es “un bien pagado con el dinero de la ciudadanía andaluza”. Y lamentó: “Asistimos al enésimo capítulo de confrontación de las administraciones gobernadas por el PP para entorpecer la apertura de un proyecto con el sello de la Junta en la capital”. Pero advirtió: “Una vez más, vuelven a errar el tiro, porque la principal perjudicada es la ciudadanía”.

Cobo subrayó: “Prácticamente, todo está listo para su apertura y el trámite de la cesión de los terrenos resulta fundamental para aprobar el decreto de creación del museo y el de la relación de puestos de trabajo, y ahora nos encontramos con esta negativa”. Fernández Palomino responsabilizó al secretario de Estado de Hacienda, José Enrique Fernández de Moya, y al propio Javier Márquez de “esta jugarreta”. Y, desde “Jaén merece más”, María Cantos reprochó: “Es otro ejemplo más de la forma de hacer política a la que se han acostumbrado nuestros representantes. No se trabaja por el bien de Jaén, sino en sacar rédito para el partido”. Y, recuperando las ideas de Max Weber, añadió: “La burocracia, que nace para gestionar los asuntos de los ciudadanos, se convierte en un arma al servicio de los partidos políticos”.