El Madrid deja vivo al Barça

Empate en el Clásico y quejas blancas con el colegiado por un penalti no pitado a Marcelo

07 may 2018 / 12:42 H.

El FC Barcelona aguantó su condición de invicto (2-2) ante el Real Madrid en la jornada 36 de LaLiga Santander, un Clásico loco y con mucha polémica, a pesar de lo poco a priori en juego, pero con la alta tensión que acompaña al duelo de eternos rivales, uno campeón de liga y otro preparando su asalto a la Champions. El intercambio de golpes repartió el pastel en el Camp Nou. Un estadio a reventar que no encontró la mejor versión de su equipo, salvo en un Leo Messi empeñado en poner el 42 en la racha de jornadas sin perder. El Barça tuvo una sufrida puesta de largo como campeón sin pasillo, de manera matemática en Riazor siete días antes. Se dejó dominar en la primera parte y sobrevivió en la segunda con uno menos por la expulsión de Sergi Roberto. A los de Ernesto Valverde les duró poco la energía de poner la guinda al título, sometidos por un Madrid en posesión del balón. A la contra, sin embargo, el lateral culé se la puso a Luis Suárez para poner el 1-0 a los 10 minutos. Fue un tanto más de la nada que del buen hacer de un Barça adormilado, sin mordiente contra pronóstico. Una contemplación que aprovechó el Madrid para empatar pronto, por medio de Cristiano Ronaldo. El portugués dio el susto, al sufrir en línea de gol ante Piqué un golpe en el tobillo. Completó solo la primera parte un Cristiano al que echaron de menos tras el descanso. Al borde del paso por vestuarios, la escalada de la tensión sobre el césped llegó a su momento más decisivo. Sin nada en juego o anecdótico parecía llevar un Clásico de eternos rivales, eternas cuentas pendientes a saldar siempre que se juntan el blanco y el azulgrana.

Ramos las tuvo con Messi y Suárez, Bale le dejó los tacos a Umtiti y Sergi Roberto se revolvió dando un manotazo a Marcelo que Hernández Hernández consideró roja y expulsión. Con uno más, sin Cristiano y con Asensio, los de Zinedine Zidane perdieron su dominio ante un Barça más junto y mejor en el centro del campo. En una contra perdonó el balear del Madrid y en la siguiente jugada Messi batió a Navas, tras una jugada que comenzó con una falta a Varane de Suárez bien reclamada por los blancos. Bale, mejor en el segundo tiempo entrando por dentro, puso el 2-2 con un gran zurdazo. A los de Valverde les tocó sufrir, a pesar de que Messi buscó la victoria en la recta final y con un futbolista menos.