El malestar ciudadano inunda “Los Puentes”
La Unidad de Gestión Vecinal se reúne hoy e insiste en la importancia de que se convoque la mesa del protocolo
En una provincia que lleva décadas aguardando la Alta Velocidad o en la que los años de espera para tener ciudades sanitarias y de la justicia se acumulan no es raro que los vecinos de Los Puentes lamenten que, “ahora mismo”, tienen abiertos los mismos frentes que “hace 30 años”. “No se ha hecho nada más que el arreglo de algunos ríos. ¡Los de arriba!”. Quien habla es el presidente de la Unidad de Gestión Vecinal, Alberto Castro. Lo hace a escasas horas de la reunión que los integrantes del colectivo mantendrán esta tarde en la sede de la Federación “Objetivos Comunes” (OCO).
El trasfondo del encuentro es el malestar. Malestar por que, a pesar de que el mapa de riesgo de inundaciones está finalizado, como reconoció el Gobierno en una sesión parlamentaria, desconocen los términos en los que se desarrolla y cuántas viviendas están abocadas a la demolición por hallarse en el cauce de los ríos. Malestar por que el proceso de regularización de las edificaciones ilegales que el Ayuntamiento emprendió en 2014 está empantanado, a la espera, entre otros requisitos, de ese mapa de riesgos, y malestar también por que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) vuelve a acometer tareas de limpieza en los ríos Eliche, Jaén y Quiebrajano, obviando al Guadalbullón.
“No entiendo esta situación. Hace dos años nos dijeron que se iban más abajo porque el presupuesto solo les permitía llegar hasta ahí y, ahora, lo mismo”, se queja Castro, que añade: “No lo vamos a consentir. Limpiando esos tres ríos, el dominio publico hidráulico se estrecha bastante. En cambio, el Guadalbullón aparece en el mapa de riesgos como si fuera el Mediterráneo”. Precisamente, el grueso de las más de 200 alegaciones que recibió el mapa de riesgos fue de vecinos de Fuente del Realejo, Pago de Juan Ramos, Pozuela y Puente Nuevo. Sus casas aparecen en dominio público hidráulico por un deslinde de los ríos que —denuncian los afectados— quedó inconcluso en 2011.
A punto de que se cumpla un año de la primera solicitud que la Unidad de Gestión Vecinal realizó al entonces subdelegado del Gobierno, Juan Lillo, para que convocara la mesa de seguimiento del protocolo de Los Puentes, el colectivo insiste en la importancia de ese encuentro para salir del “limbo” actual.
mapa de riesgos. La presentación del documento, a finales de octubre del año 2014, situó en el cauce de los ríos a más de un centenar de viviendas que, precisamente por ello, no es que no se puedan legalizar, sino que deben ser demolidas. Desde julio, la subdelegada, Francisca Molina, asegura que los técnicos de la CHG han trabajado para “perfilar” el documento, que anunció que se presentará oficialmente a principios de otoño.
contaminación. La gestión de las aguas residuales es condición “sine qua non” para la regularización de las miles de edificaciones ilegales que hay en Los Puentes. Es uno de los requisitos recogidos en el Decreto 2/2012, de 10 de enero, por el que se regula el régimen de las edificaciones y asentamientos existentes en suelo no urbanizable en Andalucía. Los vecinos plantearon en su día la posibilidad de solicitar permisos individuales, pero la CHG no accedió.
enganches. Hay muchas parcelas que —según el presidente de la Unidad de Gestión Vecinal— carecen de luz porque los propietarios levantaron la edificación sin la necesaria licencia de obras. Conscientes de que hay ilegalidades manifiestas, Castro agradece la actitud del Ayuntamiento: “No está achuchando y está haciendo caso omiso a lo que le dicen los jueces para derribar viviendas y ¡menos mal que estamos aguantando poco a poco”.