El peor mes
de enero para los cámpines jiennenses

Mucho queda por hacer en los cámpines jienneses. Así afirma el presidente provincial de la Asociación de Cámpines de Jaén, Antonio Martínez. “Los datos no son buenos, pero no siempre lo son, aunque hemos mejorado en estos diez años”, comenta. De hecho, según el Instituto Nacional de Estadística, los campistas que vistas el mar de olivos permanecen en él durante una estancia media de 1,63, con 224 viajeros. Comparado con fechas anteriores, el dato es más bajo. Tanto en 2017 como en 2017, la media estaba en 2,16; mientras que en 2015 fue de 1,78, y, en 2014, de 2,08. Tal como asegura el dirigente del colectivo, el dato no es “positivo” en sí, pero si se tiene en cuenta que en 2008 la media de las pernoctaciones estaba en 1,41, se confirma esta subida.

El mes de enero, según destaca Martínez, “no es de los mejores, ni mucho menos”, pero a partir de este instante es cuando las reservas comienzan a aumentar, en relación con la cercanía con Semana Santa, que es un atractivo “incuestionable” de la provincia. Martínez detalla que las visitas esos días son “puntuales”, con estancias breves, pero más numerosas que otros meses. “Ahora comienza un repunto importante del sector, es más, esperamos alcanzar entre un 70 y un 80 por ciento de las reservas próximamente, esperamos que más”, dijo Martínez, y añadió: “Pero depende de muchos frentes, como el temporal, por ejemplo, ahora mismo hace mucho daños a los campistas”.

Las lluvias y las crecidas de los ríos han provocado que el número de visitantes en las zonas naturales que se encuentran alrededor de la capital disminuyan, al menos a los puntos más rurales. Sin embargo, desde el sector se muestran “esperanzadores” con confirmar las reservas los próximos días.

Martínez denuncia que “hay mucho que hacer todavía en los cámpines de Jaén”, así como los que se encuentran en los alrededores del Parque Natural de Sierra de Cazorla, Segura y Las Villas están “bastante bien atendidos”, el resto del Santo Reino deja “bastante que desear por parte de las administraciones”. Uno de los problemas más graves que destaca Martínez es la falta de señalización a los cámpines. “Hay turistas que no sé cómo han podido llegar hasta ese lugar, porque ni siquiera aparecen en los GPS”, argumenta. Los carteles de indicaciones desde las carreteras son “esenciales” para que el sector pueda seguir adelante, según recalca el dirigente del colectivo, pues “viven” de esas visitas. “La presencia en los portales de las páginas web de viajes es importante, así como tener una buena valoración en ellos, hoy en día muchos turistas se manejan con estos métodos y debemos tenerlos muy presentas”, apunta Martínez. Asimismo indica que los extranjeros son un “bien preciado” que se debe cuidar en la provincia, con más información sobre los cámpines en las ferias internacionales, así como apoyo por parte de las administraciones para promocionarse tanto dentro como en el exterior de la frontera nacional.