El PP se une al cerco a VOX por cuestionar la violencia de género

La sexta de las mociones debatidas en el pleno de la Corporación Provincial de ayer, tenía por título “Refuerzo y puesta en valor de las medidas contempladas en el pacto de Estado en materia de violencia de género”. La propuesta socialista buscaba retratar la postura del PP en la bancada de la Diputación, en la que se sienta, precisamente, el presidente provincial, Juan Diego Requena. La maniobra tenía su aquel, puesto que el líder nacional de la fuerza conservadora, Pablo Casado, fue acusado de asumir el discurso de VOX, en el transcurso de las negociaciones con este partido de ultraderecha para lograr que los populares llegaran a la Presidencia de la Junta, al hablar de violencia doméstica, no de género, y afirmar: “Nos parece muy bien que haya medidas para proteger a la mujer que sufre malos tratos en su hogar, igual que también queremos que se proteja a los niños o ancianos que siendo varones sufren violencia por parte de familiares o cuidadores”. Es el punto de partida de la famosa violencia intrafamiliar con la que los de Santiago Abascal quieren dejar sin sentido la idea de que hay un maltrato dirigido a las mujeres por el mero hecho de serlo. El PP de la Diputación quiso negar estas dudas y, de ahí, que todos sus diputados votaran a favor de la iniciativa socialista. “Siempre hemos defendido y defenderemos a las víctimas de violencia de género”, aseguró Ángela Isac, que defendió la postura de su grupo.

A pesar de su respaldo a la moción socialista, el PP no se libró de los reproches. Le llegaron de todos los lados. El portavoz del grupo mixto, el alcalde de Porcuna, Miguel Moreno, que abandonó las filas populares y se presentará como candidato de Cs en las próximas municipales, se mostró durísimo con su antiguo partido. “Lo peor de todo es que ha habido voces del PP que lo han acompañado”, acusó, tras lamentar la aparición de “voces populistas de extrema derecha”, en referencia a VOX, que ponen en cuestión la lacra del maltrato hacia la mujer. “A ver cuántas manadas de mujeres se juntan para violar a un hombre”, preguntó. Miguel Manuel García, el diputado de IU, lo primero que hizo fue excusar que Unidos Podemos se abstuviera en el Congreso de los Diputados en la votación sobre el Congreso en la votación que dio lugar al pacto de estado contra la violencia machista. “Fue por considerarlo insuficiente”, dijo. Dicho lo cual, pasó, de nuevo, al ataque contra el presidente nacional del PP. “Vemos a Casado hablando de feminazis”, lamentó, y pidió a los representantes de esta fuerza, que, como “partido serio” no se dejen llevar por el “relato falso”. “Les aseguro que hablo con gente que es más progresista que todos los que estamos aquí, que me habla de las denuncias que son mentira. La idea ha calado y es muy peligroso”, advirtió. “A pesar de la toma de conciencia en nuestro país, algunas fuerzas políticas plantean la eliminación o reducción de las medidas frente a la violencia machista, como si las muertes o las denuncias no fueran motivo suficiente como para luchar en contra de esta lacra. No debemos poner en peligro el futuro y presente de las mujeres y de sus hijos e hijas”, insistió la diputada socialista Francisca Medina en su defensa de la moción. La popular Isac, ante tanto ataque, afirmó que, en Andalucía, el pacto con Cs busca avanzar en la lucha contra la violencia hacia la mujer y sobre las conversaciones con VOX, dijo: “Jamás se ha negociado propuesta que suponga una merma en los derechos de la mujer”.