Ellas patrullan en minoría

Entre los 140 agentes de la Policía Local, apenas se cuentan 12 mujeres

08 mar 2017 / 12:48 H.

Corría el año 1979, cuando, con 18 años, Puri Sánchez decidió aspirar a una plaza de la Policía Local de Jaén. Era la primera vez que este Cuerpo de Seguridad abría el acceso a las mujeres. Y cuenta: “Fue de casualidad. Fui al Ayuntamiento a presentar una instancia para opositar a auxiliar administrativo, me enteré de que había oposiciones para la Policía Local y me presenté”. Sacó la plaza, pero —relata, a modo de anécdota—: “El primer día, no quería ni ir a trabajar”. Sabía que era la única mujer que había aprobado la oposición. “Y me metía en un mundo de hombres”, indica una agente que, hoy, se jacta de haber abierto camino, aunque no haya sido fácil. En una España que acababa de salir de la dictadura y que estaba en transición, el rechazo que Sánchez no encontró en su familia al anunciar que iba a opositar a la Policía Local, lo halló en la sociedad. Recuerda insultos machistas del tipo “¡lo que tendrías que estar es cosiendo calcetines y no quitándole el pan a un padre de familia!”, mientras regulaba el tráfico subida en unos tacones y con una falda. “No sabían ni qué uniforme ponerme”. Y, si algo que hoy parece tan básico era un problema, impartir un curso de defensa personal fue un dilema. “A esta mujer, ¿con quién la ponemos?”, recuerda que se preguntaron cuando llegó el momento. Para resolver lo que entonces se percibía como un “conflicto”, el Ayuntamiento le costeó el curso a su novio. “Yo era una cría y lo vi bien. Hoy no lo hubiera consentido”, zanja la agente, que fue viendo cómo se incorporaban nuevas mujeres, aunque muy poco a poco. “A los dos años de estar yo, entraron 2 mujeres y vi el cielo abierto. Poco después, también llegaron otras 2, pero, durante 20 o 22 años, no ha entrado ninguna”, indica.

En la actualidad, de los 140 agentes que integran la plantilla del Cuerpo Local de Policía solo 12 son mujeres (el 8,5%). Y, de ellas —apunta Elena Peláez—, apenas 8 están en activo. Las 4 restantes se hallan en segunda actividad. El Cuerpo y la sociedad española han evolucionado. “Pero poquito —alerta Sánchez—. España sigue siendo muy machista”. Con 8 años de trayectoria en la Policía Local de Jaén, Peláez (32 años) lamenta la “minoría” de mujeres en la plantilla y que, en la calle, los insultos de algunos ciudadanos, mientras están realizando su trabajo, no han desaparecido. Con los compañeros, “no hay problema”. “Nos tratan como a ‘uno’ más”, valora Peláez, aunque Sánchez alerta de que, “en el afán de demostrar” su capacidad: “Es ponernos la gorra y nos transformamos”. “Somos un poco tiacos”, confiesa, divertida, aunque anhelando esa singularidad femenina que, en el quehacer diario como políticas, sí aporta un plus de comunicación y de empatía con los ciudadanos del que —dicen— carece la mayoría de los hombres.