Estrenos en Málaga con talento jiennense delante y detrás de las cámaras

Málaga en abril es anfitriona del mejor cine español, desde hace 19 años. A lo largo de diez días, su festival acoge lo mejor del séptimo arte, estrenos, presentaciones y una alfombra roja por la que decenas de reconocidos actores y directores desfilarán para tratar de alzarse con sus Biznagas. Más de ciento sesenta películas forman sus diferentes secciones, un amplio escaparate en el que Jaén está presente a través de sus actrices más conocidas y profesionales dentro de los equipos técnicos. Como buena muestra, ya la misma gala de inauguración la presentará la linarense Natalia de Molina, la que hace un año se alzara en ese mismo escenario con la Biznaga de Plata como mejor actriz.

Y apenas ella se baje del escenario, comenzarán los estrenos. La gala de apertura acogerá la proyección del thriller Toro, el segundo largometraje del barcelonés Kike Maíllo, protagonizado por Luis Tosar y Mario Casas, que llega también hoy a los cines. Se proyectará, en esta gala inaugural, por primera vez, fuera de concurso. En su reparto, ya aparece el nombre de un actor jiennense, Manuel Salas. Este santistebeño, con una amplísima trayectoria teatral, también ha formado parte del elenco de cintas como La Isla Mínima, de Alberto Rodríguez, y Rey Gitano, de Juanma Bajo Ulloa.

Ya el domingo llegará al festival malagueño otra cinta con importante presencia jiennense, en este caso, dentro del equipo técnico. Es El signo de Caronte, que se proyectará en el Teatro Cervantes, dentro de la sección Málaga Premiere. Esta es la ópera prima del director Néstor F. Dennis, rodada en 2015, en Sevilla. Cuenta, entre su reparto, con actores tan reconocidos como Rubén Cortada, Mélani Olivares, Pep Tosar, Jaime Ordóñez, Fernando Guillén Cuervo, Lucía Jiménez y Carlos Ruiz. Y tras las cámaras hay cuatro jiennenses como parte del equipo. Son el tosiriano Paco Cuenca, que es el director de fotografía de la cinta; el villacarrillense José Luis Altarejos, en la labor de foquista; Olivia Aranda, cordobesa afincada en Jaén que estuvo en el equipo de producción, y el tosiriano Fernando Bueno, que trabajó en el rodaje de varias escenas en las que se utilizó un “drone”. Esta película relata la historia de Carlos, un escritor inmerso en su última novela, en la que describe la vida de Ángel Arriaga, un asesino en serie encarcelado. Tras una entrevista en la que le revela sus más íntimos secretos, su suicidio cambiará la vida del escritor por completo.

Uno de los grandes títulos de esta décimo novena edición del Festival de Málaga es Kóblic, la última película que protagonizan el actor argentino Ricardo Darín y la jiennense Inma Cuesta. Antes de que llegue a los cines —que será el 17 de junio como ha anunciado DeAPlaneta esta misma semana— se podrá ver en el Teatro Cervantes el próximo viernes, 29 de abril, en la víspera de la clausura del festival. Sebastián Borensztein, aclamado director y guionista argentino (Un cuento chino), se pone detrás de las cámaras en este thriller ambientado en el lado más oscuro de la dictadura argentina. El filme cuenta la historia del capitán Tomás Kóblic (Ricardo Darín), comandante de la Armada Argentina, que en 1977 se enfrenta a la misión más complicada de su vida: pilotar un “vuelo de la muerte”. Atormentado por el terrible destino hacia el que él mismo dirige a los prisioneros de la dictadura, Kóblic toma una decisión imprevisible que marcará el resto de su vida y que le obligará a huir a un pequeño pueblo de la Pampa.