Futuro en la cuerda floja

El entrenador Juan Carlos García manifiesta que a él le gustaría continuar al frente del club serrano

06 jun 2017 / 12:25 H.

El futuro del entrenador del CB Cazorla Jaén Paraíso Interior, Juan Carlos García, se mueve en la incertidumbre. Tras unas semanas de descanso que tanto club como técnico se han dado para meditar la trayectoria de cada una de las partes y tras los éxitos obtenidos con la consecución del título liguero como campeones del grupo D de la Liga EBA y la disputa de la fase final por el ascenso a LEB Plata, donde llegó hasta el último encuentro con opciones para subir de categoría, el entrenador sevillano asegura que su deseo es permanecer en el club serrano la próxima temporada. No obstante, admite que ese tema está en manos de la junta directiva del club “y no depende de mí”.

En este sentido, el técnico indica que se ha tomado unas semanas de descanso para “desconectar y reflexionar”. Matiza que en las próximas semanas escuchará las ofertas que su representante tenga sobre la mesa y subraya que su primera opción “es la de seguir en el CB Cazorla”. Asimismo, Juan Carlos avanza que si continuara otra temporada en el club serrano habría muchos cambios en la plantilla actual y cambiarían muchas cosas, ya que le gustaría “aplicar un modelo de juego de equipo en el que cada jugador cumpla su rol específico”.

Respecto a su llegada al club cazorleño a finales de 2016, Juan Carlos García confiesa que se encontró “un vestuario totalmente roto en todos los sentidos, especialmente en lo deportivo y en lo personal”.

El técnico sevillano se encontraba, por entonces, entrenando en Primera Nacional a un conjunto navarro que perseguía el objetivo de subir a EBA. Fue entonces cuando recibió la llamada de Juan Francisco García, presidente del CB Cazorla y, gracias a una de las cláusulas de libertad por oferta de categoría superior, pudo firmar por la escuadra cazorleña. Esa decisión permitió remontar el vuelo a una plantilla que, gracias a las medidas urgentes tomadas, con más carga de trabajo físico, psicológico y táctico, mejoró una trayectoria que la mandaba a una casi segura fase hacia el descenso si no vencía los tres encuentros que tenía por delante. Lo hizo, y el CB Cazorla se convirtió en un club especialista en remontadas desde esa fecha. Juan Carlos García asume que “ha sido muy gratificante” conocer a un gran grupo de personas que en todo momento le han apoyado en su labor.