La estrategia aparece para superar una difícil prueba

El Linares se hace fuerte en casa y la victoria ante el Torremolinos
lo acerca a la zona de privilegio

23 oct 2017 / 10:44 H.

El Linares Deportivo se rehizo de la amarga derrota la pasada jornada en Málaga con una victoria cómoda frente al Torremolinos en Linarejos. El equipo de Joseba Aguado, en la línea de sus últimos dos encuentros, pareció volver a recuperar una imagen cercana a lo que el míster busca y saltó al campo con las ideas bastante claras. Quizá no al nivel del choque frente al Loja, pero sí suficiente para imponer su dominio con balón, en especial durante la primera parte. Los azulillos fueron dueños de la posesión desde el pitido inicial pero siempre con una clara intención de llevar el esférico arriba lo antes posible. Este Linares sabe que el potencial de su once siempre reside en la última porción del campo, por lo que la labor de Juanfran y Sergio Ortiz –el doble pivote que alineó Aguado en la tarde de ayer— fue la de buscarle un ritmo alto al juego, no contemporizar ni buscar un fútbol demasiado pausado y encontrar en banda a Braim y Omar, ayudados por los apoyos de Barba, para que ellos marcaran diferencias

Y así las ocasiones no se hicieron esperar y se aglutinaron en una primera media hora en la que las figuras de Jorge Barba, moviéndose y regateando entre líneas, y de Pekes, con sus característicos desmarques, fueron protagonistas. El propio azulillo pudo hacer el primero a los diez minutos tras una balón de Omar desde la izquierda, que la zaga sacó sobre la línea, pero el que sí acertó un minuto después fue Palomeque. El lateral remató de cabeza a las redes un córner botado desde la izquierda y el árbitro anuló el tanto por una supuesta falta en el salto.

La grada se encendió pues esa fue la primera gota de un arbitraje bastante particular para ambos conjuntos, aunque el enfade duró poco pues, posteriormente ,Sergio Ortiz dio un anticipo con un disparo muy escorado que avecinó lo que iba a ocurrir. En el 24, tras una falta forzada en la frontal por Barba, el especialista a balón parado azulillo la mandó junto a la escuadra para adelantar a los suyos. Con el gol, el Linares continuó buscando el segundo y dispuso de ocasiones en las botas de Pekes y Braim para hacerlo, pero a la contra el Torremolinos estuvo cerca de hacer el empate. Primero con un cabezazo al palo de Ibón y después con una carrera larguísima de Sánchez que Robador.

El segundo tramo del partido mostró a un equipo malagueño algo más arriba en busca del empate, pero sin ninguna ocasión de verdadero peligro más allá de una vaselina de Amaya que cerca estuvo de sorprender a Robador.

Por su parte, el Linares, algo más agazapado atrás, buscó transiciones rápidas contra una línea defensiva más adelantada para matar el choque. Pudo hacerlo Sergio Ortiz y Barba en alguna ocasión pero la tranquilidad al marcador llegó, de nuevo, a balón parado en el 69. El especialistas volvió a servirla de cine en un córner y Josema el 2-0. El final del choque sirvió para dar minutos a Javi López en su puesta a punto, tras la operación, y para que Aguado empiece a recuperar efectivos en ataque. Pese a ello, en defensa, tras la salida por lesión de Ibra y la baja de Admonio, se le acumulan algunos contratiempos.

Con este triunfo, el Linares consiguió que le acercan a los cabeza de grupo y le permiten volver a trabajar sobre victorias para ir, así, engrasando una maquinaria que todavía tiene mucho margen de mejora y que demostrar.