La expectación se desborda para capturar la superluna

Aún no había caído la tarde y ya había objetivos apuntando a la única Luna de la Tierra para captar un fenómeno que —según los expertos— no volverá a repetirse hasta 2034. Después de 68 años, el satélite, que estaba el lunes en su punto más cercano a la esfera terrestre (el perigeo), lució un 14% más grande y un 30% más rutilante. Y, aunque era muy difícil que lo apreciara el ojo humano, en algunos parajes, fue imposible que los “admiradores” no quedaran apabullados ante su inmensidad, cuando, por un efecto óptico, en su fase llena, emergió en el horizonte. Ese momento fue espectacular y la expectación que alimentó la NASA fue tal, que no fueron pocos los que se dieron un baño de Luna y desempolvaron la cámara para congelar el instante. Sin embargo, científicos del Planetario de Madrid y de Pamplona quitaron ayer romanticismo a la escena. Recalcaron que la “Superluna” debería denominarse “luna en el perigeo” y aseguraron que esta situación volverá a repetirse el próximo 14 de diciembre, informó Europa Press.

El divulgador del Planetario de Madrid, César González, señaló: “Astronómicamente, es algo normal”. “En realidad —explicó—, es una Luna en el perigeo, pues la fase llena coincide con el punto de la órbita más cercana a la Tierra. Para que ocurra, la distancia a la que se encuentra la Luna en el perigeo no debe ser mayor de un 10% y, el lunes, se daba esa condición”. No obstante, el 14 de diciembre se podrá ver, de nuevo, con estas características.

Por su parte, el astrofísico, divulgador y director del Planetario de Pamplona, Javier Armentia, negó que fuera un fenómeno: “Había mucha expectativa y era algo erróneo porque la Luna estaba muy bonita y grande, pero eso es una ilusión lunar porque parece que es mayor cuando lo que ocurre es que está más cerca del horizonte”.