Las gafas para cuestionar el mundo

El coordinador general de IU Alberto Garzón diserta sobre el ser comunista hoy

24 feb 2017 / 12:01 H.

Se trataba de provocar y lo consiguieron. Pero no solo por titular la conferencia del coordinador general de IU y diputado de Unidos Podemos “Ser comunista hoy”. En un mundo acelerado, en el que, como decía el filósofo recientemente fallecido Zygmunt Bauman, se ha impuesto el pensamiento líquido y la comunicación empieza a limitarse a los 140 caracteres de un tuit, IU enarboló la bandera de la reflexión y, en el “espacio idóneo” para ejercerla (la Universidad), derrochó argumentos para, ya sea con la etiqueta de comunistas o sin ella, negar la realidad “para transformarla”. “¡No para evadirla!”, aclaró el coordinador de IU en Andalucía, Antonio Maíllo, que abogó por la recuperación del lenguaje “como antesala” de la reconquista de los valores humanos.

En una Aula Magna que se quedó literalmente pequeña ante la expectación que despertó la presencia de Alberto Garzón, el televisivo coordinador general de IU comparó el comunismo con la ciencia, con la duda metódica y dijo que son las gafas para cuestionar la realidad y ese “sentido común” que se transmite de generación en generación y que se interioriza, “inconscientemente”, como si fuera el pensamiento original y propio que no es.

Ante un auditorio mayoritariamente joven, Garzón tiró de manual para hacer un repaso, didáctico y ameno, de la historia del comunismo. Recordó a sus principales ideólogos (desde Marx y Engels hasta Lenin, Gramsci o Lukács), aportando anécdotas sobre ellos y enfatizando: “El militante comunista no solo actúa o piensa. Hace las dos cosas al mismo tiempo”. Subrayó que el marxismo “no es un catecismo, ni un sistema filosófico cerrado, sino una tradición política abierta”. “Una guía para la acción y para transformar la realidad, un instrumento para mejorar la vida de la gente y una esperanza para salir de la pobreza”, abundó, frente a quienes recelan y ven una amenaza en el comunismo.

Garzón cuestionó el concepto de democracia: “¿Diríais que vivimos en sociedades libres?”, preguntó, retóricamente. “Depende de cómo definamos la libertad”, continuó, sin esperar respuesta. Previó que un liberal contestaría afirmativamente: “Cualquiera puede entrar en un supermercado. Incluso, una persona sin hogar”. “Un comunista marxista republicano —contrapuso— diría que la libertad no es que alguien no te impida hacer algo, sino poder hacer lo que quieres. Ser libre es tener acceso a un trabajo y derecho a la vivienda, a una sanidad y a una educación públicas. Es un concepto de democracia más pleno y real”, indicó, evocando el movimiento 15M del que nació Podemos. Recordó que los derechos sociales han sido conquistas “arrancadas a través de la lucha, con sufrimiento y represión”. Y reflexionó: “Si aceptamos que son conquistas, también asumimos que nos los pueden quitar”. De hecho, comparó “las certezas de nuestros padres” con las incertidumbres de un presente en el que se está condenando a una mayoría social a la precariedad y a la pobreza. Contra eso, defendió el comunismo como el camino hacia la igualdad.