Los jóvenes se involucran en las labores de conservación

Diez universitarios trabajan en el entorno de la ciudad ibero-romana

23 jul 2018 / 08:23 H.

Recuperar y conservar el entorno del yacimiento arqueológico de Cástulo. Este es el objetivo de los programas de voluntariado, que este verano, en su tercera edición, traen a diez estudiantes de la Universidad de Jaén que disfrutarán, además, de una experiencia de convivencia y práctica diaria en el desarrollo de actuaciones en este campo de trabajo.

Entre los días 1 y 15 de agosto, Cástulo se llenará de jóvenes titulados en carreras como Historia del Arte, Turismo o Arqueología. Mediante su trabajo, pondrán en valor el vasto patrimonio de la ciudad íbero-romana. Los alumnos desarrollarán las actividades en colaboración tanto con la dirección como con el personal técnico del yacimiento, que los orientarán en las tareas de recuperación y conservación del entorno.

La iniciativa se enmarca en el proyecto “Siglo XXI en Cástulo”. Además, los estudiantes, que pertenecen a otras titulaciones que se imparten en las escuelas politécnicas de Jaén y Linares, recibirán diez horas iniciales de formación teórica, que complementarán con setenta y cinco horas prácticas en el propio yacimiento. Además de los trabajos planificados, el programa contempla el alojamiento en la ciudad durante esos días, así como una visita guiada a otros lugares de especial interés patrimonial, como el Centro de Interpretación del Patrimonio Histórico y Cultural “El Aprisco”, y el Paraje Natural “Cascada de la Cimbarra”, ambos situados en el Parque Natural de Despeñaperros. El programa cuenta con la financiación de la Dirección General de Participación Ciudadana y Voluntariado de la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales, así como con la colaboración del Ayuntamiento de Linares y la Delegación en Jaén de la Consejería de Cultura de la Junta.

El Vicerrectorado de Planificación Estratégica, Calidad y Responsabilidad Social de la Universidad de Jaén impulsa con especial interés este tipo de voluntariado cultural. Así, los participantes son alumnos que, de forma altruista y sin ánimo de lucro, dedican parte de su tiempo libre a realizar tareas de identidad cultural, la difusión de los bienes y la promoción de actividades artísticas bajo supervisión técnica.