Más que un ambulatorio
61 fotos del yacimiento arqueológico recorren el centro de salud
El documental de National Geographic “El resurgir de la Atlántida” y su conexión con Jaén y Marroquíes Bajos hizo que en innumerables ciudadanos germinara la amarga sensación de pérdida de un vasto patrimonio local olvidado, despreciado y expuesto sin pudor al expolio, pero también la esperanza de que no todo está perdido y de que aún se pueden corregir errores, al menos, no repitiéndolos. Tras 7 años de obras y polémicas, la inauguración del Centro de Salud de Expansión Norte no solo cubre las necesidades de 25.000 personas en este barrio. En una demostración de respeto y orgullo de una riqueza arqueológica inconmensurable, el Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha convertido las plantas baja y primera del ambulatorio más grande de la comunidad autónoma en una puerta abierta a la Jaén más remota.
61 fotografías cuentan la historia de las excavaciones y la importancia del yacimiento. Y, además, solo es el principio, porque, alterando el proyecto arquitectónico inicial, los vestigios “fueron adecuadamente protegidos y han quedado accesibles y en disposición a ser redescubiertos”. Quien habla es el administrador del Distrito Sanitario de Jaén, Francisco Rascón, que explica: “Inicialmente, solo se iban a hacer las catas, el inventario, un catálogo y construir encima. Pero, a la vista de la importancia de lo que encontraron, en 2008-2010, obligaron al arquitecto a modificar todo el proyecto para conservar el máximo posible de restos”. Precisamente, de la lectura del informe arqueológico surgieron los esfuerzos del Distrito Sanitario y de su administrador porque no quedara oculta la riqueza encontrada. Porque confiesa: “Me da rabia, cuando salgo de viaje, que hay ciudades con menos riqueza arqueológica, la ponen en valor y se venden como si tuvieran el mayor patrimonio”.
En octubre de 2015, Rascón empezó a recopilar información de las excavaciones y, a lo largo de 2016, en un mano a mano con la empresa Euro Rótulos comenzaron a preparar los bocetos que han alumbrado esta exposición permanente que, desde ayer, está a la vista de todos, sean usuarios del centro de salud, amantes del patrimonio local o turistas. 61 paneles fotográficos —algunos de hasta cuatro metros por dos y medio— que el proceso de excavación, los muros defensivos del Calcolítico que repiten en Marroquíes Bajos el patrón de la ciudad mítica Atlántida y alguna recreación de la vida en esta zona de Jaén seis milenios atrás. “Mi esperanza —concluye Rascón— es que esto sea el germen para que se ponga en valor el patrimonio que tenemos”.
La modificación del proyecto arquitectónico para la construcción del Centro de Salud de Expansión Norte abre la puerta a que, en el futuro, los restos arqueológicos hallados en esta parcela puedan ser visitables, incluso. Durante las obras, los vestigios se taparon con una malla geotextil sobre la que se echó grava. En la actualidad, siguen tapados porque “no hay presupuesto para ponerlos a la vista”. Pero, si en el futuro lo hubiera, no habría dificultad para desenterrarlos y sacarlos a la luz. De momento, son visibles en los paneles que se despliegan por el centro de salud y que, como indica Rascón: “Da información de la riqueza arqueológica que, por desgracia, tenemos escondida en Jaén”.
Los sondeos arqueológicos dejaron al descubierto una riqueza patrimonial indiscutible. Del Calcolítico (4.000 años antes de nuestra era) destaca parte del primero de los cinco muros concéntricos que componen Marroquíes Bajos, que recorre la parcela de este a oeste. Además, localizaron las cuevas subterráneas en las que vivieron aquellos primeros habitantes de Jaén y restos de las cabañas que dejaron atrás la vida subterránea 2.000 años después. También hay vestigios de la época romana y de la islámica. De esta última se documentó la estructura de un pozo que debió estar en un patio exterior. Por desgracia, la aportación documentada del siglo XX son escombros y basura.