Mestizaje musical para acercar más “las dos orillas”

Flamencubeando regresa, dos años después, al escenario de los Baños Árabes

29 jun 2018 / 17:04 H.

Fue un encuentro mágico, envuelto por la brisa estival del verano y en un enclave histórico como el Centro Cultural Baños Árabes. Allí, y enmarcado en el programa Noches de Palacio, se dieron cita Luis Delgado, padre e hijo; Fernando Delgado y Curro Pérez, los miembros de Flamencubeando, quienes deleitaron a los jiennenses con su espectáculo En las dos orillas. Unión de culturas, una cita musical que fusionó los ritmos latinos con los andaluces.

Así, los acordes flamencos de una guitarra española encontraron en el son cubano y el bolero dos aliados armónicos a través de los cuales tocar temas de artistas tan reconocidos como Serrat, de quien sonó Lucía, Aquellas pequeñas cosas y Mediterráneo; Los Panchos, con su famosa canción Si tú me dices ven, o Pajarillo Verde, de Soledad Bravo, letra que sonó, por primera vez en el disco Cantos de Venezuela, en 1974.

Y es que dos años habían pasado desde la última cita con Flamencubeando en la capital que, curiosamente, se celebró justo en el mismo escenario que los acogió. La formación se mostró agradecida, ilusionada y muy emocionada por volver a los Baños Árabes y a tocar ante un público al que echaban de menos. Y no solo lo hicieron sino que, además, se llevaron un baño de masas. El triunfo vino acompañado de un repertorio renovado y bastante estudiado. Así, Nostalgia, de Michel Camilo, abrió este esperado concierto, que continuó con temas como Fina estampa, de Chabuca Granda; Arroz con Cocolón, de Inti-Illimani, y Yo vengo a ofrecer mi corazón, del cantautor argentino Fito Páez.

Una lluvia de aplausos hizo de este espectáculo un homenaje a la música del otro lado del Atlántico que, acompañada de ritmos sureños, invitó a bailar a la luz de la luna en plena noche de verano. Las gardenias de Machí cerraron la velada, pero el público quiso más y Flamencubeando no dudó en obsequiarles con dos temas para poner el broche de oro a esta cita. Obsesión y Si te contara, esta última de Diego “El Cigala”, levantaron a los asistentes de sus asientos.

La puesta en escena resultó magnífica, así como la interpretación, la afinación y las voces e instrumentos de este cuarteto familiar que, sin lugar a dudas, ofreció una velada especial. En ella, hicieron honor al nombre de su concierto y, con sus acordes y melodías, lograron su propósito y acercaron, un poco más, las dos orillas —la andaluza y la latinoamericana— para hermanarlas a través de la música, un pasión que lograron transmitir a todos los jiennenses.