Un tesoro recuperado para los vecinos de Jabalquinto
Restauración de un valioso Niño Jesús mutilado en la Guerra Civil
Una historia repleta de encanto. La parroquia de Nuestra Señora la Encarnación de Jabalquinto exhibe, en todo su esplendor, una “joya”. Se trata de una imagen del Niño Jesús datada en el primer tercio del siglo XVI. La restauración de la imagen está muy ligada a un hijo del municipio, el carmelita descalzo Juan Dobado, actualmente prior de la orden en la ciudad de Sevilla.
Dobado, quien supervisó el proceso, explica que se trata de la “recuperación de un tesoro”. El religioso detalla las circunstancias en las que se salvó la imagen, perteneciente a la Cofradía de Nuestro Padre Jesús. Indica que una mujer arriesgó su vida para salvar la imagen —que, no obstante, resultó con las manos mutiladas— de una hoguera encendida durante la Guerra Civil ante la iglesia. Después la conservó en su casa hasta que, recientemente, la familia la entregó.
El carmelita, de 47 años, recuerda que, de niño, cuando era monaguillo tuvo la ocasión de ver fugazmente el Niño Jesús, del que recuerda su pelo. Juan Dobado, quien también es doctor en Historia del Arte, destaca que se trata de una pieza “valiosísima” y “de categoría”.
El jabalquinteño explica que la restauración es un regalo de la comunidad de carmelitas hispalenses, que también aportó la peana dorada y la corona de plata añadidas a la escultura del Renacimiento. A la presentación asistieron una sesenta personas. Juan Dobado, quien se encargó de exponer los detalles de la pieza y de su restauración, subraya la componente emocional, ya que algunas de las personas presentes recordaban la hoguera de 1936, que destruyó buena parte del patrimonio religioso local. El Niño Jesús queda expuesto en una vitrina, aunque es muy probable que sea solicitado para exposiciones.
Entre los asistentes al acto se encontraban el alcalde, Pedro López, y el párroco, Manuel de Castro. El munícipe destacó el valor artístico y sentimental. “Me ha causado una sensación muy buena. Las obra tiene mucha importancia, pues enriquecerá mucho la iglesia”, afirma. La recuperación de esta creación suscita expectación entre los vecinos y entre los amantes del arte.
Dobado subraya la valía artística del Niño Jesús de Jabalquinto. La pequeña pieza, de unos 35 centímetros de altura, es única en la provincia de Jaén y en Andalucía solo tiene parangón en otra vinculada con la reina Isabel la Católica, actualmente en Granada capital. Corresponde a la escuela de Malinas, en la región belga de Flandes. La ciudad se encontraba dentro de las posesiones de los Habsburgo —de hecho el emperador Carlos V nació en la urbe flamenca de Gante—. De acuerdo con el experto, este tipo de imágenes era importada en España por personalidades de relevancia. Por ello, aventura que en este caso pudo llegar a través de los marqueses de Jabalquinto.
El proceso de restauración, a cargo del castellonense Carles Salafranca, duró cuatro meses y fue supervisado, en Sevilla, por el propio religioso jabalquinteño. El carmelita precisa que el estado de conservación general era bastante bueno. No obstante, se añadieron a la obra de arte las ma- nos, que habían sido mutiladas en 1936. Para recrearlas, el restaurador se inspiró en otras esculturas de este tipo pertenecientes a la escuela de Malinas. Igualmente, se han reparado los rasguños que afectaban al Niño Jesús. En cuanto a la policromía original, se mantuvo. Por lo que respecta al cabello, se doró con pan de oro fino para que recupera el esplendor original de la pieza.