A la captura del lince “viajero”

Litio, un ejemplar de lince liberado, en 2015, en Portugal, campa a sus anchas por Barcelona. En concreto, el felino se encuentra por la zona del Bajo Llobregat, donde ha sido pillado “in fraganti”. Debido a que no es su hábitat natural ni el entorno más recomendado para él, personal del proyecto “Life+Iberlince” se desplazaron desde Andalucía hasta Cataluña para tratar de atraparlo y devolverlo a su origen.

“Estamos en lo que se conoce como el cinturón industrial de Barcelona, de ahí que tengamos el objetivo de capturarlo para chequear su estado y reliberarlo. Hace falta mucha paciencia y tiempo de espera hasta que él decida a entrar en las tres jaulas que nos hemos traído y colocado”, explicó Miguel Ángel Simón, director del proyecto de reintroducción del lince en la Península Ibérica. Junto a él, un veterinario y un biólogo integran el equipo de esta “misión”.

Según comentó el experto, hay “experiencias previas” de ejemplares de “linces viajeros” que recorren miles de kilómetros desde sus puntos de origen, donde son liberados, hasta otras zonas, por lo que la “huida” de Litio desde Portugal hasta Barcelona no se considera un caso aislado. “Ahora, gracias a que se usan los collares GPS, se puede conocer con mayor detalle la localización de los linces, mientras que antes, cuando se empleaban los collares terrestres, era más difícil localizar a los ejemplares extraviados”, detalló Miguel Ángel Simón.

Técnicos del cuerpo de Agentes Rurales de la Generalitat de Cataluña observaron y fotografiaron en el área metropolitana de Barcelona, el pasado 29 de mayo, al ejemplar de lince ibérico al que Simón y su equipo de profesionales tratan de echar el guante. Lo localizaron gracias a un operativo de búsqueda ejecutado a raíz de varios avisos de avistamientos de este animal en la mencionada zona. Se trata de la primera vez que se detecta la presencia de un lince ibérico en Cataluña desde principios del siglo XX. Así, los técnicos del servicio de Fauna y Flora de la Generalitat lograron la identificación de Litio gracias a su collar emisor.

“Esperamos poder capturarlo lo antes posible, puesto que los fines de semana esta zona está muy concurrida de personas. Además, esperamos hacerlo pronto también porque se trata de un área donde hay tráfico de vehículos. Lo que se hace es colocar un atrayente en la jaula para poder atraparlo, de tal manera que hacemos unas revisiones continuas por si aparece”, explicó Miguel Ángel Simón.

Los técnicos estudian su recaptura con el propósito de cambiarle el collar emisor y descargar la información registrada en el dispositivo, lo que permitirá conocer los recorridos realizados por este ejemplar con más detalle. “Probablemente, una vez que lo capturemos, lo dejaremos en cuarentena en el Centro de Cría de La Olivilla, en Santa Elena. Lo estamos valorando, aunque dependerá de cómo se encuentre el animal”, dijo Simón. Por el momento, el personal de “Life+Iberlince” sigue de cerca los pasos de Litio, un ejemplar nacido, en 2014, en Huelva.