“Estas instalaciones públicas están realmente asquerosas”

Recogida de firmas para mejorar los vestuarios y el campo de fútbol de Mures

04 mar 2019 / 16:07 H.

Padres de Mures han dicho basta. Después de aguantar años que sus hijos —federados en las categorías benjamín, alevín e infantil— usen los vestuarios y el campo de fútbol de la aldea en “malas condiciones” deciden pasar a la acción para conseguir soluciones. “Estas instalaciones públicas están realmente asquerosas”, resume una madre. El colectivo prevé entregar mañana en el Ayuntamiento las firmas recogidas en los últimos meses, más de 250 según sus datos. Han rubricado la petición incluso familias de menores de otros equipos que han pasado por las dependencias.

El texto que acompaña a las firma precisa que los progenitores pusieron en conocimiento del presidente del Mureño, Rafael Laguardia, su malestar y que este explicó que ha solicitado las mejoras al Ayuntamiento de Alcalá la Real en varias ocasiones. “Le duele la boca de pedirlo”, añaden una de las integrantes del colectivo de padres. En el documento se detallan las necesidades detectadas. Por un lado, se solicita el cambio del termo de agua caliente por uno de más capacidad —pues el actual se queda corto para que todos los niños se duchen—, la sustitución de las ventanas —las actuales son de madera “muy deteriorada y entra frío”—, la ampliación del desagüe, el arreglo de las múltiples humedades y la colocación de azulejos —“las paredes tienen agujeros por las filtraciones”—, la reparación de los azulejos del suelo —algunos están rotos “con el problema de que se corten los niños”—, nuevos sanitarios —“los WC actuales son muy antiguos, no tienen tapa, están amarillos y huelen muy mal aunque se echen productos de limpieza potentes”— y la colocación de otras puertas en los servicios —“están muy deterioradas y se quedan atrancadas o no cierran—. Igualmente, se reclama acondicionar el vestuario del árbitro y colocar un tabique para que haya intimidad, aparte de un termo de agua caliente. El colectivo insta a habilitar un desagüe mayor en la entrada de los vestuarios y que haya una limpieza de las instalaciones dos días a la semana como mínimo y “más a fondo”.

Laguardia corrobora la versión de las familias y añade que, como estas, él también pide que se instale césped artificial, pues se trata de uno de los últimos campos de albero en las competiciones provinciales. También critica la falta de percheros, la antigüedad de los asientos de los vestuarios y existencia de “cables pelados”. Según dice, lo último en mantenimiento municipal consistió en tareas de pintura y el arreglo de las ventanas porque “tenían cristales rotos y faltaban bisagras”, con el consiguiente peligro.