Hamid Hadri: “Ahora nos hemos quedado a cero”

La familia que perdió su casa por el derrumbe ocurrido, el día 4, en la calle Real pide auxilio para salir adelante

17 abr 2017 / 17:01 H.

La familia de Hamid Hadri, formada por él mismo, su esposa y tres hijos de uno, tres y seis años, permanece en la Hospedería Zacatín desde que el pasado día 4, de madrugada, se vino abajo su vivienda de la calle Real al desplomarse la que se encontraba justo por debajo. Sin embargo, el cabeza de familia prevé que el viernes se marchen a un domicilio de alquiler situado cerca del cuartel.

Hadri, originario de Marruecos, se muestra agradecido por el apoyo recibido hasta el momento. El Ayuntamiento les facilita alojamiento de manera temporal, y la comunidad educativa del colegio Martínez Montañés, donde está matriculado el niño mayor, ha recogido ropa y calzado para él, sus hermanas y sus progenitores.

“Ahora nos hemos quedado a cero. Lo hemos perdido todo”, explica a Diario JAÉN Hamid Hadri. El hombre destaca que se encuentran en una situación precaria y que, para comenzar una nueva vida, necesitarán muebles y otros enseres para su nuevo hogar. Además, resalta que después de un golpe no se encuentra en condiciones para trabajar. Solía buscarse la vida en distintas actividades como la búsqueda de chatarra y tareas en el campo. Además el padre, que lleva alrededor de una década en Alcalá la Real, destaca que la casa ha sido totalmente demolida y que las autoridades le han prohibido que utilice unas estancias situadas por detrás.

En cuanto a lo que pasará con el solar en el que se ha convertido su casa, no sabe lo que ocurrirá, aunque se deseo es alcanzar con el Ayuntamiento un acuerdo positivo para las dos partes. Por el momento, precisa, no ha recibido oferta alguna al respecto. Hadri remarca que la “culpa” de lo ocurrido fue del vecino del inmueble de debajo del suyo, que lo tenía “abandonado” desde hace años, lo que desencadenó el percance.

Se muestra muy afectado por la pérdida y destaca que le costará pagar el alquiler. No obstante, está contento de que no hubiera que lamentar daños personales en el aparatoso derrumbe.