Juillas recupera su linterna

Restauración de la pieza rota en una procesión de 2017 y fabricación de una réplica para evitar futuros daños

25 mar 2018 / 11:30 H.

Si hay una figura con tirón popular en la Semana Santa de Alcalá la Real, esa es la de Juillas. La encarnación de Judas Iscariote, con máscara, melena pelirroja y una particular indumentaria, con sus evoluciones, es el foco de atención de niños y mayores los días grandes de la Pasión. El pasado año, en un lance, durante la porfía del apóstol traidor con el capitán de los judíos en la parte de abajo de la calle Veracruz, la linterna de Juillas se rompió de manera accidental. La situación causó desolación en la Hermandad de los Apóstoles, a la que pertenece el personaje, pues la pieza orginal es una talla en madera de cedro real datada en el siglo XVIII. Se trata del “tesoro” más antiguo del colectivo.

Sin embargo, la cofradía no se quedó de brazos cruzados, sino que comenzó las gestiones para restaurar la obra de arte y, para evitar daños como los ocurridos en 2017 y en anteriores ocasiones que dejaran el característico objeto en una situación irreversible, se propuso la fabricación de una réplica exacta que garantice la conservación de la primigenia.

La recomposición de la linterna corrió a cargo de José Vega Campos, alférez de la tropa de la Hermandad del Ecce-Homo, que coincide con la de los Apóstoles tanto el Jueves como el Viernes Santo. A él se le ocurrió la idea de una reproducción exacta con tecnología de impresión en tres dimensiones. La labor de diseño y digitalización fue asumida por Francisco Javier Rosales Ávila, gerente de la empresa alcalaína de servicios geométricos Gesingeo, en colaboración con la compañía jienense 4D Geoservices, especializada en patrimonio. La impresión se ejecutó en las instalaciones de Smart Materials 3D Printing, firma situada en el polígono industrial El Retamal.

Desde la Hermandad de los Apóstoles, Raúl Israel López Zafra expresa su agradecimiento y del resto de miembros de la cofradía, “por el enorme esfuerzo y la labor” de José Vega Campos, que se prestó de manera desinteresada. Él mismo, junto con un grupo de miembros del Ecce-Homo costeó el proyecto. “No podemos olvidar a Francisco Javier Rosales Ávila, que de muy buen grado acepto participar. Mil gracias a todos de corazón, una vez más se demuestra que la unión entre cofrades y hermanos, hace posible el buen fin de un sueño”, indica López Zafra.

tradición. La linterna, portada por “Juillas” en las procesiones, es un elemento simbólico. Aunque no luce de manera física, este objeto le sirve para escudriñar en su búsqueda en unas calles atestadas de público que lo increpa. Es en la recta final del desfile del Viernes Santo por la mañana, principalmente en El Llanillo, cuando se despliega toda la magia de los rifirrafes entre Judas y el capitán. Al final, el soldado no se ablanda ante su arrepentimiento por haber vendido a Jesús y lo conmina a ahorcase.