La élite del combate medieval

Mucha ilusión a pesar de las dificultades. El alcalaíno José Luis González de Lara y Gómez de Urda vive con intensidad los días previos a los mundiales de Combate Medieval. Por tercer año competirá con la selección española. Al existir dos federaciones internacionales, hay un par de competiciones con una categoría. Por un lado está “Battle of the Nations”, previsto en Barcelona, concretamente sobre la arena de la plaza de toros Monumental, entre el 28 de abril y el 1 de mayo. González de Lara competirá en las categorías de cinco contra cinco y veintiuno contra veintiuno.

El guerrero explica que el clasificatorio para formar parte este año de la selección fue distinto. Hubo un torneo en el que los tres primeros clasificados se convirtieron en los representantes del país. “De los once clubes que hay en España, solo el mío, Urna Regnum [Urna de los Reinos], con base en Zaragoza, se presentó íntegro. El resto hizo coaliciones con los mejores luchadores de cada uno para formar así equipos más competitivos. Ha sido, sin duda, la edición que más difícil resultó conseguir plaza en la selección porque el nivel crece a pasos agigantados. Los que hasta hace poco eran nuevos son ya luchadores muy competentes y por otra parte está la gente nueva que viene de artes marciales mixtas (mma)”, asegura el representante del equipo.

El segundo mundial, el de la federación internacional IMCF, está previsto en Spottrup, el municipio de Dinamarca con el castillo de la Edad Media mejor conservado en todo el país nórdico. En este caso, José Luis González de Lara competirá en las modalidades cinco contra cinco, diez contra diez y dieciséis contra dieciséis. En esta último, los españoles —con él como capitán— quedaron terceros en 2016.

trayectoria. El alcalaíno, quien se dedica como profesional a gestionar un gimnasio, lleva años dedicado a una disciplina muy exigente. Su dedicación permite que, desde 2015, tenga un hueco en la selección nacional. Sus comienzos se remontan a 2014.

“Es un deporte muy completo y exigente, ya que existe una buena forma física, así como destreza. Tenemos que entrenar como demonios”, afirma el caballero. Entre sus planes, para verano prevé participar en una liga española de tres contra tres. Incluso se intentará la posibilidad de celebrar una de las pruebas algún castillo de la provincia.

La indumentaria de González de Lara incluye un escudo de Alcalá la Real, aparte de una armadura. Hasta ahora siempre había peleado con maza, pero desde este año bracamante, un especie de espada pesada, que destroza la coraza. La normativa permite a los competidores el arma que elija, siempre que reúnan dos condiciones, unas normas de seguridad para evitar graves daños y que exisitieran en el Medievo.