Otra polémica por la terraza del centro social mureño

La portavoz de IU, Rafaela López, aprovechó, una parte de su intervención en el turno de ruegos y preguntas del último pleno para cargar contra la situación del centro social de Mures, por la colocación de mesas y sillas en la vía pública. No hubo respuesta de Gobierno alcalaíno.

La crítica se refería a lo ocurrido durante las fiestas de San Roque, en agosto de 2017, cuando la concesionaria optó por no colocar terraza ante la polémica suscitada por IU con denuncia a alcalde de Alcalá, Carlos Hinojosa, —luego archivada—. A raíz de la autorización municipal, según López en septiembre de ese año expiraba el plazo voluntario de ingreso de la tasa. En junio de 2018 —dijo—, la concesionaria pidió la anulación de la deuda por no haber ocupado la vía pública. Agregó que incluso hubo un procedimiento de apremio y embargo, hasta que, el pasado mes de octubre, pagó el débito. Sin embargo, la concejal desveló que un decreto de la Alcaldía posterior acordó la devolución de una parte de la cantidad por no haber hecho uso.

López preguntó por qué se concedió permiso si no había pagado antes la tasa pese a que la ordenanza obliga a la autoliquidación y que el Ayuntamiento no hizo nada para cobrar la deuda. Aseveró que Hinojosa llamó al tesorero y le envió correos electrónicos para anular la liquidación pese a que es “ilegal” dar tales instrucciones y a que no se daban supuestos recogidos en la normativa. Opinó que el dinero debería haber “devuelto” el dinero a la entidad de Mures, titular de la plaza donde estaba la terraza.