Un delincuente, detenido tres veces en unos días por robos

Miguel Ángel G. A. consiguió un botín valorado en más de 16.000 euros

05 ene 2017 / 11:46 H.

Espiral delictiva en Navidad. El alcalaíno Miguel Ángel G. A., “Negrete”, está en el calabozo a la espera de pasar a disposición judicial después de ser detenido por robo tres veces en unos días. Las dos primeras quedó libre con cargos. La cadena de sucesos empezó el 29 de diciembre de madrugada, cuando agentes de la Guardia Civil imputaron al hombre de 35 años después de sufrir un accidente en una rotonda de la carretera de Montefrío. Conducía pese a carecer del preceptivo permiso y, además, se negó a someterse a la prueba de alcoholemia. En torno a una hora después, fue arrestado cuando robaba en el supermercado DIA, situado en las cercanías del lugar en el que había causado la salida de vía de su vehículo. Fue sorprendido mientras robaba. Causó cuantiosos destrozos.

El lunes volvió a ser arrestado, en compañía de su pareja —una mujer de veintiocho años de origen magrebí— por un delito de robo con fuerza en las cosas, cometido en el interior de la SAFA. Se les considera presuntos autores de la sustracción, que afectó principalmente a la residencia del centro educativo alcalaíno. El valor del dinero sustraído ronda los 10.000 euros y el de los desperfectos originados los 6.000.

Ayer por la mañana el Instituto Armado volvió a apresar a Miguel Ángel G. A. por otro robo con fuerza en las cosas, en este caso perpetrado en el colegio Martínez Montañés. Los artículos están valorado en alrededor de 6.000 euros y los daños en 1.500. En un comunicado, la Comandancia explica que todos los objetos sustraídos han sido recuperados y devuelto a sus dueños. Entre los bienes había desde material tecnológico hasta una guitarra española. El comunicado indica que al detenido —que anteriormente estuvo en prisión— le constan antecedentes por delitos similares, además de lesiones y amenazas, altercados en locales de ocio de Alcalá. De hecho, el pasado mes de febrero sufrió lesiones en uno de los revuelos.

Sustracción de una matanza en el campo

Ladrones se llevaron de una pequeña casa rural, situada en la zona de la Pasada de Baena —cerca de la N-432—, embutidos elaborados por la familia propietaria, cerveza, aceite y unos helados. Los ladrones penetraron tras forzar los barrotes de una ventana. El valor estimado de los productos cárnicos ronda los doscientos euros, sin contar el trabajo para su preparación. El inmueble en cuestión ya había sufrido anteriores asaltos nocturnos, el último ocurrido meses atrás.