Un maestro emblemático se jubila
Adolfo Díaz Álvarez se retira después de cuarenta años como enseñante en la SAFA
Es un maestro emblemático de la SAFA. Así quedó demostrado en su último día en activo. Adolfo Díaz Álvarez salió camino de la jubilación, esta semana, en un pasillo de aplausos formado por alumnos y docentes. El enseñante se retira a los 64 años, después de cuatro décadas en la institución, todos menos los ocho primeros, cuando estuvo en Montellano (Sevillana), en las aulas de la Sagrada Familia de Alcalá la Real.
Díaz —quien será homenajeado por compañeros, amigos y familiares mañana, a partir de las tres y cuarto, en Caserío Vía Priego— asegura en su despedida: “Voy a echaros de menos. He tratado de educar con el corazón y siempre en valores. Nunca he tenido problemas con nadie y he trabajado muy a gusto”. Aunque impartió otras materias, su fuerte eran las Matemáticas. Algunos de sus alumnos, como el actual alcalde, Carlos Hinojosa, estudiaron esta carrera. A partir de ahora, el ya jubilado docente anuncia que se dedicará a estar volcado con su nieta y el resto de sus seres queridos.
El director de la SAFA alcalaína, Nicolás Molina, manifiesta, en nombre propio y de la comunidad educativa: “Sentimos un profundo agradecimiento por su magisterio y ejemplo de servicio y entrega. Es alguien muy afable. No conozco a nadie que se lleve mal con él. Se nos jubila un gran maestro y una persona excepcional”.
trayectoria. Adolfo Díaz Álvarez nació en 1953 en la ciudad minera de Langreo (Asturias), hijo de alcalaínos de Mures y Ermita Nueva que habían emigrado por motivos laborales. La familia regresó cuando él tenía catorce años. Fue alumno de la SAFA. Estudió Oficialía en Alcalá y Maestría en Andújar. Después permaneció como interno en la residencia del centro mientras hacía el Curso de Orientación Universitaria (COU) en el instituto Alfonso XI. Después de cursar Magisterio en la SAFA ubetense y de dos años de servicio militar empezó un trabajo en el que ha sido un símbolo.