Amianto, asignatura aún por aprobar en Torreblascopedro
El alcalde ve que el curso escolar se acerca y aún no se retiró todo
Da igual que el reloj sea de arena, de sol, de pared o de pulsera, el tiempo avanza y el próximo curso escolar, la vuelta al cole, está a poco más de un mes. El amianto de los tejados de uralita es hoy un problema parcial en el colegio San José Artesano de Torreblascopedro, pues solo queda por quitar el del gimnasio. “Le pasé el presupuesto a la Delegación de Educación de los 12.500 euros que cuesta retirarlo y me he quedado esperando una respuesta, pues no me han contestado nada”, asegura Juan María Ruiz, alcalde de Torreblascopedro. Y añade: “No sé si está en sus planes la retirada, ya que, en su día, la Junta de Andalucía dijo que iba a ser pionera en España”.
El amianto es un mineral de aspecto algodonoso, de gran durabilidad y bajo coste, que se utilizó en su día como aislamiento térmico en fachadas, tabiques y tejados. También para la fabricación de uralita, un material de construcción que se usó durante décadas, con su forma acanalada para tejados, o en la fabricación industrial de depósitos particulares de agua, tubos y tuberías y otros objetos. Cuando trascendió que el amianto era un elemento cancerígeno, comenzó el desmantelamiento de ese material en muchos edificios, tanto públicos como privados.
Según los expertos, el hecho de estar en contacto con el amianto no supone apenas un riesgo para la salud; de hecho los trajes de bomberos se fabricaban hace años con amianto al ser de aspecto fibroso y resistente a las llamas. El problema surge cuando el contacto con el amianto es prolongado o se manipula de forma que sus partículas pasan al aire, entonces puede provocar enfermedades del aparato respiratorio y generar un cáncer de pulmón. De ahí que se activasen las alarmas cuando ese material forma parte de la techumbre de las aulas de algunos colegios, como es el caso del San José de Torreblascopedro.
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