Una velada de música y teatro

Las sesiones estivales de la Escuela Creativa de Andújar concluyen una nueva edición con una celebración

30 jul 2017 / 11:07 H.

Los alumnos de verano de la Escuela Creativa de Andújar celebraron, un año más, su fiesta de fin de curso. En esta ocasión, la música, el baile y el teatro fueron las disciplinas elegidas para clausurar la propuesta formativa.

Poco antes de las diez de la noche, los alumnos comenzaron a dejarse ver por el patio del instituto de Enseñanza Secundaria Nuestra Señora de la Cabeza. Los participantes, preparados para la ocasión, se mostraron impacientes sobre el escenario para mostrar todo lo aprendido durante este mes en la escuela de verano.

Así, las primeras notas sonaron y junto con el acompañamiento del director de la escuela, Marcos Hervás, los primeros niños comenzaron a cantar. Numerosos fueron los jóvenes que se subieron al escenario para interpretar canciones de diferentes artistas combinando letras en inglés y español. En una de las actuaciones, el director interpretó junto a una alumna “Vivo por ella” del artista Andre Bocelli. Tras un breve descanso comenzó la adaptación teatral de “Mulán”. Todos los alumnos de la escuela mostraron todo lo aprendido en esta primera etapa del verano que ya ha concluido.

Durante este intenso mes, los alumnos recibieron diferentes talleres como música y movimiento. En él, los integrantes aprendieron canto e interpretación además de desarrollar su creatividad musical. Por otro lado, en las clases de teatro y danza los alumnos hubo juegos teatrales, disfraces y escenificaciones. La magia también tuvo un lugar de relevancia en esta escuela de verano. Los jóvenes conocieron diferentes actividades de ingenio, además de papiroflexia y globoflexia. Los más pequeños también han sido protagonistas en la iniciativa formativa. Talleres como el de animación infantil ha contado con cuentacuentos y manualidades. El grupo de menores tuvo la oportunidad de realizar una serie de actividades paralelas entre las que encontraban la relajación, la concentración y la escucha activa, entre otras. Los malabares y las acrobacias también han estado presentes en la propuesta.

Fueron sesenta y tres los alumnos participantes en la experiencia, con edades comprendidas entre cuatro y catorce años. Por su parte, el director de la convocatoria estival, Marcos Hervás, después de la formación impartida realizó un balance positivo de este curso.

Por otro lado, el coordinador, Miguel Medina tenía palabras de agradecimiento para las familias, para los monitores, al Ayuntamiento de la ciudad y para el centro educativo por la cesión de sus instalaciones. Medina destacó la variada oferta educativa que tuvieron a su alcance los pequeños iliturgitanos. “Cada hora los niños han tenido una actividad distinta”, expresó, satisfecho, el responsable. Medina valoró la colaboración del alumnado y el buen ambiente en que transcurrieron las sesiones formativas.