Buenos, bonitos y con buen destino

El variado mercadillo triunfa en el I Festival de la Solidaridad en Quesada

04 nov 2018 / 11:18 H.

T odos unidos por un mismo objetivo. Llegó el gran día, aquel en el que los problemas de aquí se paralizan para preocuparse de los que tienen aquellos que viven al otro lado del charco y que no tienen tanta suerte. Comenzó así el I Festival de la Solidaridad “Quesada por Guatemala”, promovido por el Ayuntamiento y la ONG Quesada Solidaria. El objetivo, bien claro, recaudar el máximo posible de fondos dirigidos a paliar los daños causados en Guatemala por la erupción del Volcán de Fuego el pasado mes de junio, unido a potenciar, entre los participantes, valores relacionados con el compromiso y la solidaridad. Algo de lo que saben, y mucho, los vecinos de Quesada, que se vuelcan en cada acto organizado por Quesada Solidaria aunque, en esta ocasión, de manera muy especial.

Se puede afirmar porque la jornada comenzó desde temprano con un gran ambiente que duró todo el día. El primero de los actos programados fue un pasacalles que estuvo a cargo de la banda de cornetas y tambores La Pasión de Quesada, que deleitó a los presentes con marchas como Bendícenos Jesús, Amor de Madre y Justa Condena. Una vez terminado el paseo, la plaza de la Constitución se llenó de múltiples voluntarios que se repartieron por la zona para ofrecerle a todos los visitantes los productos que formaron parte del Mercadillo Solidario, formado por artesanía guatemalteca y quesadeña. Había recuerdos para todos los gustos, tales como pulseras, monederos, cojines, bolsos, elementos decorativos, tejas decoradas, bolsas de merienda y un sinfín de productos que, además de ser bonitos y haberse realizado desde la ilusión y el cariño, tenían un valor añadido, cada uno de ellos tenía el fin de ayudar. Por ello, muchos de los que hicieron de comerciantes por un día se quedaron pronto casi sin existencias, como en el caso de una madre y su hija, Irene Ceballos, que hicieron floretas, magdalenas, roscos y pestiños, y que, al principio, se mostraron dudosas de su éxito, que se corroboró unas horas más tarde cuando su mesa se quedó prácticamente vacía.

Otro de los productos estrella del mercadillo solidario fueron las camisetas, con dos opciones a elegir, las de color negro con el logotipo de la ONG y las blancas que, además del sello de la organización, llevaban impreso un cuadro de Zabaleta, que es la imagen para el cartel del Festival de la Solidaridad “Quesada por Guatemala”, y que el propio presidente de “Quesada Solidaria”, Basilio Dueñas, regaló a uno de sus primos, Juan Bautista Palop. El motivo que propició esta decisión fue que tiene la particularidad de que en él se representa un paisaje, como pocas veces hizo Zabaleta, más dado a reflejar campesinos de cara atormentada.